Los días de encierro en el hogar sin poder salir no son tarea fácil para los adultos, pero para los niños y jóvenes todavía es más complicado de asimilar, teniendo en cuenta que asocian el estar en casa con vacaciones y tiempo de ocio, y al no poder salir como lo hacen normalmente la ansiedad, el estrés y las rabietas pueden comenzar a aparecer.

Por eso, varios expertos coinciden en que es fundamental hablar con ellos y hacerles entender las nuevas rutinas y dinámicas que hay que asumir con el encierro en casa, "la palabra clave en este proceso se llama flexibilidad, debemos generar nuevas estrategias que permitan realizar las rutinas diarias de una manera diferente y desde el ejemplo nuestro", acoseja la magíster en Psicología Clínica, María Paula SalazarLa experta explica que como padres o cuidadores debemos hacerles entender a los niños que la vida sigue, pero de una manera diferente. No obstante, considera que eso no es algo negativo, pues pueden adquirirse nuevos hábitos provechosos que antes no se tenían y que pueden mantenerse una vez pase toda esta situación, como lo es la lectura.En ese sentido, la profesora del programa de fonoaudiología de la Universidad del Rosario y doctora en Lingüística de la Universidad de Lyon, Ángela Martínez, dice que debe sacarse en el día al menos 30 minutos para leer en familia y en voz alta, "no importa si los niños aún no saben leer, ustedes les puede leer algo que ellos quieran. Si ya saben, pueden turnarse la lectura por días".

Además, aconseja que se establezca un espacio especial para la lectura, puede ser el cuarto de los hijos, o la sala. Una vez terminen la sesión del día pueden comentarla o hacer alguna actividad relacionada con la historia, como algún dibujo o un final alterno.Explica que entre los muchos beneficios de la lectura está el hecho que estimula la imaginación, ya que a diferencia de la computadora y la televisión hay menos bombardeo de imágenes junto a las palabras. Por eso, las expertas recomiendan desempolvar muchos de los cuentos viejos que tenemos en casa o aprovechar las diferentes herramientas que entidades públicas y privadas han puesto a disposición gratis en la red para comenzar a leer cuentos e historias fáciles que enganchen a los niños con la lectura.Por ejemplo, el Ministerio de Cultura ofrece en época de cuarentena la serie ‘Leer es mi Cuento‘, disponible para lectura, o descarga gratuita accediendo al Portal MaguaRed http://www.maguared.gov.co/, donde podrá encontrar una colección de textos clásicos de literatura infantil y juvenil, con la participación de algunos de los ilustradores más importantes del país.

En la recopilación hay cuentos, poesías, juegos de palabras, adivinanzas, fábulas y rondas de autores como William Shakespeare, Rafael Pombo, Tomás Carrasquilla, Horacio Quiroga, Los hermanos Grimm, Miguel de Cervantes, Horacio Benavides, Candelario Obeso y Rudyard Kipling, entre otros.Asimismo, la Biblioteca Digital de Bogotá puso a disposisición recursos digitales en todas las áreas del conocimiento.El director de Oportunidad Estratégica y exdirector de la Fundación Corona, Jorge Hernán Cárdenas, concluyó diciendo que toda crisis trae una oportunidad, por eso invitó a las familias a que vean esta situación como una oportunidad para buscar nuevos espacios de socialización, en los que la lectura puede jugar un papel clave: "Sin duda es un espacio para una mayor socialización familiar. Exige creatividad de padres e hijos. Para padres, hay que tener otro chip de relacionamiento, buscando formas de sobre llevar el momento y mantener la calma".