Durante la pandemia, mientras unos se quejaban de todo lo que estaba sucediendo, al otro lado de las pantallas de los computadores de los alumnos, desde el teletrabajo, para no interrumpir la formación académica de millones de estudiantes que estaban en cuarentena, muchos profesores ponían a volar la imaginación para hacerle el quite a la crisis y tratar de mantener motivados a sus alumnos.
Con la convicción de que leer es una de las herramientas más fuertes para que el estudiante logre su desarrollo académico y su posterior éxito en la vida profesional, le dedicaron esfuerzos a buscar salidas creativas que este martes fueron galardonadas por el BBVA, en la VI edición del Premio Nacional al Docente.
En la convocatoria participaron 840 docentes de 24 departamentos de Colombia, 8 de los cuales se llevaron una bolsa de 35 millones de pesos.
Lo mejor es que se trata de maestros de regiones como La Guajira, Boyacá, Huila y Cundinamarca, que muchas veces no tienen acceso a herramientas que pueden tener los docentes de las grandes ciudades.
El fin del BBVA era premiar las mejores iniciativas para incentivar lectura y escritura durante la primera fase de la pandemia y el período de alternancia entre sus estudiantes.
Mario Pardo Bayona, presidente del BBVA en Colombia, sostuvo que para esa entidad financiera, “la educación es la puerta de las oportunidades y es el camino para la construcción de una sociedad más equitativa e inclusiva. En este sentido, el papel de los docentes es fundamental. En la versión de 2021 quisimos reconocer el trabajo de los maestros que se vieron enfrentados no solo a encontrar una nueva forma de ejercer su rol, sino a encontrar alternativas para que sus alumnos mantuvieran viva la esperanza y el deseo de continuar con sus estudios pese a la difícil situación que afrontábamos en Colombia y el mundo”.
Un par de las historias de los ganadores
Llamar la atención hacia la creación literaria en medio de una crisis como la que trajo consigo la covid-19, en la que al principio ni siquiera había seguridad de la sobrevivencia de la raza humana, fue una de las búsquedas del docente Yufrank Ferney Vargas, de la Institución Educativa Pablo VI, de Cubará (Boyacá).
Vargas, licenciado en idiomas modernos, fue el ganador del primer puesto en la categoría ‘Propuestas innovadoras para la alternancia’, por su propuesta de despertar la creación literaria de los estudiantes a partir del olfato, uno de los sentidos que volvió a tener mucha visibilidad en la pandemia, precisamente porque su pérdida era uno de los síntomas de la enfermedad.
Al igual que sucede en la cata de vinos, la propuesta del maestro se basa en la conexión entre los recuerdos y el aroma.
La idea se le ocurrió al maestro porque una de las circunstancias difíciles para los jóvenes estudiantes era la de tener que adaptarse a la educación virtual, sin contacto cercano con sus compañeros y todo lo que implica la actividad en el aula de clases.
Fue así como Vargas planteó un camino para reconectar a sus estudiantes con el entorno escolar, como una estrategia para la alternancia educativa, y como espacio de expresión de aquellos sentimientos de estrés, incertidumbre y exasperación, provocados por la situación vivida.
Oler el miedo
¿Qué hacía? En las jornadas de encuentro, durante la alternancia escolar, el docente buscaba lugares donde había aromas que trajeran recuerdos para los estudiantes, a veces agradables, aunque para mucha gente, los recuerdos del covid son tormentosos, porque tienen que ver con las muertes de seres queridos que se llevó el virus.
El ejercicio vivencial debía terminar plasmado en La bitacoraroma, una especie de diario para distintos ejercicios de escritura relativo a los aromas, las experiencias y los recuerdos personales.
De la mano del maestro, ese insumo se está utilizando en creación literaria, con lo cual no solo permitió una catarsis de los jóvenes que pudieron expresar las experiencias vividas, sino que académicamente es una herramienta para fortalecer la redacción de textos a partir de la construcción de imágenes sinestésicas.
La meta en este proyecto es lograr la escritura de un minicuento, que tendrá como referencia el colegio, los aromas registrados en La bitacoraroma, y el uso de la sinestesia para la creación de imágenes olfativas.
Sopa de tu propio chocolate
Bien dice el adagio popular que a veces hay que dar sopa de tu propio chocolate. Si a los jóvenes les gustan las redes sociales como YouTube, Facebook o Instagram, ¿por qué no aprovecharlas para motivar el aprendizaje?
Algo así realizó el docente William Fernando González Sánchez, profesor de filosofía de la Institución Educativa Chiloé, de Soacha, Cundinamarca, ganador del primer puesto en la categoría ‘Experiencias significativas de lectura y escritura en tiempos de pandemia’.
González hizo del aprendizaje de la filosofía, que a veces es complejo para los estudiantes, una experiencia divertida que, por supuesto, asegura la apropiación del conocimiento y el desarrollo del pensamiento crítico.
¿Cómo? Los textos filosóficos eran convertidos en caricaturas, cuentos, ensayos, columnas de opinión. Los pensamientos de los filósofos eran trasladados al mundo real. Adicionalmente, eran llevados a espacios virtuales para compartir las perspectivas, sin contar con que los estudiantes tenían encuentros con personalidades a las que entrevistaban para ahondar en el mundo de la política, mientras los estudiantes fortalecían su capacidad de diálogo y argumentación. Es así como, están presentes en YouTube, Facebook, Instagram y Twitter, y tienen su propio portal web: www.critica.edu.co.
Otros ganadores
En la premiación del BBVA, en la misma categoría en la que González ganó el primer lugar, fue destacado además el trabajo de Aura Violeta Guevara, del Inem Jorge Isaacs, de Cali, por su proyecto “Sueño rodante, el bus de las mil y una historias”, que se llevó el segundo lugar.
El tercer puesto lo ocupó Juan Carlos Epinayu, de Riohacha (La Guajira), quien durante la pandemia impulsó el programa “El rincón de los saberes”, adonde el docente llegaba cada semana tras recorrer varios kilómetros por entre las rancherías, con textos, guías y lecturas para sus estudiantes.
Mientras tanto, en la misma categoría en la cual Yufrank Vargas ocupó el primer lugar, también fueron galardonados Yovani Delgado, de Pitalito (Huila) y profesor de la Institución Educativa Pachakuti, con el segundo lugar. El tercer puesto lo obtuvo Álvaro Sánchez, de la Institución Educativa Julio César Turbay, de Soacha (Cundinamarca).
Además, los docentes Ana Cecilia Vidal, de Arroyo de Piedra (Bolívar), y John Efraín Sánchez, del Liceo Santa Librada (Neiva), fueron reconocidos por sus estrategias “Helprofe” y “Tradición oral, narrando territorios”.
El que enseña y el que aprende a leer vive la vida como una fiesta, y poco se dedicará a agredir al otro.