El paro nacional de los estudiantes cumple 51 días, y algunas universidades como la de Antioquia y la de Caldas llevan casi 3 meses en cese de actividades, con jornadas de asambleas internas. Pese a las más de 7 marchas realizadas en todo el país, todavía no hay nada acordado con el gobierno nacional. A pesar de que el tiempo corre, el movimiento estudiantil no se apaga. Luego de la movilización realizada el 28 de noviembre, los 13 estudiantes y los 6 profesores que representan la comunidad universitaria en la mesa terminaron una sesión más de diálogo con el gobierno. Entre las conclusiones que dejó la reunión, los estudiantes expresaron que el Ministerio de Educación y de Hacienda aún no dan respuestas concretas frente a los problemas de fondo: adición de recursos a la base presupuestal de las universidades y reformas estructurales al modelo educativo que complica el acceso a la educación superior de todos los colombianos. José Cárdenas y Juan Camilo Muñoz, miembros de la Asociación Colombiana de Representantes Estudiantiles  (Acrees), contaron lo dicho en el encuentro. Muñoz reiteró que para que se logren nuevos recursos para las universidades e instituciones técnicas y tecnológicas del país es claro que son necesarias reformas normativas, algo a lo que el gobierno no reacciona. “Nosotros instalamos la mesa de diálogo el 1 de noviembre y el gobierno nacional no nos ha hecho una sola propuesta seria. Nosotros hemos realizado más de 6 propuestas con recursos tendientes a la base presupuestal. Se sorprenderán, de manera bochornosa, que aún no estamos cerca de lograr ningún acuerdo. El gobierno no da un paso adelante pero, digamos, reconoce que tiene que resolver la crisis de alguna manera. Lo que es bochornosa es la forma que quiere hacerlo”, dijo Muñoz. Por esto, los voceros expresaron que la discusión se seguirá dando en las calles y en la mesa de diálogo. “Gracias a las movilizaciones es que se han dado avances. Solo tenemos una garantía: seguir en movilización, porque el gobierno se muestra intransigente e indolente”, comentó José Cárdenas. Además, dijo que la protesta social que ellos adelantan debe seguir siendo pacífico, creativa y masiva, porque deben “mantener el apoyo y el corazón de la sociedad del lado de nuestra causa”. En diciembre se tienen pensadas dos fechas tentativas para las nuevas marchas: el 6 o el 13 de este mes, con posibilidad de que se decidan por la segunda. El lunes en la tarde volverán a sentarse con el gobierno para continuar el debate.

El que ninguna de las partes se haya levantado definitivamente de la mesa genera expectativa frente a un interés de ambas partes por llegar a un arreglo. Hasta la fecha, hay 13 puntos que se retomarán en el encuentro de la próxima semana. En la última sesión (realizada los días 28 y 29 de noviembre), gobierno y voceros crearon una especie de cuadro para analizar el posible consenso en cada una de las propuestas. Esa matriz muestra que en 7 de ellas hay alguna especie de aprobación por parte de todos los actores.  Entre los puntos acordados están: en adelantar una mesa técnica con los gobernadores para discutir sobre la distribución de los recursos provenientes de las regalías, mantener los recursos de las fuentes de excedentes de cooperativas para la educación superior pública, y hacer extensivo a las instituciones técnicas y tecnológicas (ITTU) los descuentos por votación que tienen las universidades públicas.