Camilo Ernesto Ballestas Martínez, representante del colectivo Buen Vivir de Cartagena, es uno de los 50 jóvenes que este martes se unieron bajo un mismo fin: hablar de educación en medio de la recta final de las elecciones presidenciales. Una de sus grandes preocupaciones, como líderes de su comunidad, es la calidad y la debida relevancia del sector en cada territorio del país.Puede leer: Qué tanto es el interés de los candidatos por la educación ruralBallestas lleva dos años trabajando mediante la educación y la comunicación popular en el corregimiento Pontezuela en la zona rural de su ciudad. Allí, en conjunto con el colectivo de la zona, ‘Corporación Negros Representando Negros’ lideran el proyecto de la emisora comunitaria, en la que se promueve la cultura “que no solo cumple la función de transmitir información sino también la creación de un espacio de enseñanza con un enfoque étnico” afirmó.El colectivo de este joven de 24 años, también aportó en la creación de un festival de danza moderna del que participan más de 25 niños y adolescentes del corregimiento. Además, ha logrado la articulación de los campesinos y artesanos de la zona como una asociación que reivindique sus derechos con la apropiación de las raíces que poco a poco se han ido perdiendo. “Ahora estamos trabajando en un proceso de innovación cultural, nosotros lo que queremos es potenciar el valor cultural y la innovación de la misma”. En la coyuntura electoral quieren alzar su voz y demostrar que los jóvenes pueden hacer grandes cosas por el país, “queremos incentivar a la comunidad para que se le demuestre a ambos candidatos que la educación, en este caso la educación rural y étnica afrodescendiente propia del territorio, debe ser agenda principal, es una necesidad. Los jóvenes lo sienten así y vamos a demostrarlo”.Le recomendamos: Así ven los candidatos presidenciales el futuro de la educaciónTambién piden que la educación sea tenida en cuenta según la cotidianidad de cada región, “es necesario una educación propia para los territorios que potencie lo que tienen las zonas. Queremos mostrarle a los candidatos que hay jóvenes en todo el país haciendo iniciativas sobre la educación, que se den cuenta de que existe un territorio rural que necesita una educación propia contextualizada”.En este punto concuerdan todos los jóvenes como Yurani o Urapono en su lengua nativa que significa flor del amanecer, una líder del resguardo indígena Karmata Rua en Antioquia. “En nuestra comunidad, la educación de los occidentales ha sido, a los ojos de nuestros adultos, algo negativo” aseguró. Sin embargo, su deseo es que la educación, además de ser pensada para cada territorio, se de en las mismas condiciones, “la educación le duele a todo el mundo, sobre todo a nosotros, no porque sea india mi maleta tiene que ser de paja, el derecho debe ser de todos” agregó.Además, Darin Fabián Navarro, con su colectivo de jóvenes ‘Red Creando Lazos de Paz’ en el municipio Río Blanco, Tolima, busca crear estrategias desde su comunidad para que la educación sea la prioridad del cambio, “la educación tiene que ganar en segunda vuelta. Nosotros los jóvenes nos tomamos las campañas a pecho y debemos salir y decir que la educación es el arma fundamental para el país”.Le sugerimos: Lo que necesita la educación según los expertosLos grandes actos de estos jóvenes han logrado impactar de manera significativa en su sociedad y han demostrado su incidencia en la participación política dando voz a las comunidades. Ahora quieren tomar esa voz para demostrar su preocupación ante el futuro de una educación que responda como prioridad para el desarrollo del país.