Los docentes de la capital volvieron a las calles, esta vez para mostrar su descontento en relación a dos puntos que se incluyen en el Plan de Desarrollo, de 604 páginas de extensión, que el alcalde, Enrique Peñalosa, radicó ante el Concejo de Bogotá el pasado viernes. Por un lado, se oponen a que 15 de los 30 colegios nuevos que Enrique Peñalosa se ha comprometido a construir se administren bajo la fórmula de la concesión. Es decir: infraestructura oficial construida con recursos estatales, pero administrada por manos privadas, encargadas de prestar el servicio educativo, previo proceso de licitación pública.Para William Angulo, presidente de la Asociación Distrital de Educadores (ADE), una de las organizaciones civiles convocantes de la marcha, junto con los sindicatos de la Empresa de Teléfonos de Bogotá, esta es "otra medida más del alcalde y del presidente Juan Manuel Santos para privatizar lo que históricamente le pertenece a los bogotanos”. Y añade: “el distrito construye con nuestra plata y le pide a lo privado que lo explote”.Para Angulo esta decisión afecta directamente a la estabilidad laboral de los profesores y genera mayor precariedad. “Es un ahorro a costa de los maestros porque no se les paga según el escalafón de docente oficial ya que las contrataciones se hacen con el ente privado y no con la Secretaría”, explicó a Semana Educación.Los 15 colegios públicos que han generado la polémica se sumarán, una vez construidos, a los 22 que Gustavo Petro mantuvo bajo esta modalidad de contratación durante su administración y que el nuevo alcalde no va a desmantelar, según se indica en el Plan de Desarrollo de Peñalosa. En estos se atienden a 34 mil estudiantes, lo que representa el 4 % de la matrícula oficial.Semana Educación se puso en contacto con la Secretaría de Educación Distrital que no quiso dar declaraciones más allá de remitirse al comunicado oficial emitido en respuesta a la convocatoria de huelga. En este, la secretaria María Victoria Angulo, insta a los 382 colegios oficiales de la capital a “garantizar el derecho a la educación a los cerca de 860 mil del sistema educativo de Bogotá”, aunque "reconoce el derecho a la protesta". El segundo motivo que ha incitado a la movilización del gremio docente y de los sindicatos de la Empresa de Teléfonos de Bogotá tiene que ver con la posible venta de acciones de la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB). En el documento se alega que esta estrategia ayudará a “generar recursos en el corto y mediano plazo para financiar programas de inversión social y de infraestructura”.