A través del Centro de Tecnologías y Construcción para la Madera, el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena) instaló diferentes programas de formación para los internos de la cárcel La Picota, lo anterior, sin importar las limitaciones y situación de los internos, informó esta última entidad a través de un comunicado de prensa del 26 de octubre de 2021.

La entidad señaló que por intermedio de un convenio interinstitucional suscrito hace varios años con el centro carcelario se ofrecen programas de formación en: construcción, mantenimiento y reparación de estructura en guaduas, este último el más pedido por la población carcelaria.

Así mismo, hay formación técnica en carpintería, operario en carpintería y todos los cursos complementarios que se requieran.

“Quiero agradecer al Sena y al profesor Pedro Sánchez, que me dio la oportunidad de realizar el curso en técnico en guaduas; quiero salir adelante y tener otra oportunidad afuera. Me gasté un año y tres meses para terminarlo, pero [estoy] muy contento porque aprendí a cómo desarmar, procesar e incrustar la guadua; [fue] algo que jamás pensé terminar y que sin duda colocaré en práctica ahora que obtenga mi libertad”, señaló William Saldaña, interno y aprendiz, citado por el Sena en el mismo comunicado.

De acuerdo con la información suministrada por el Sena, “sin importar el delito, la escolaridad o la edad de los internos, los programas ofertados al interior de la cárcel La Picota han tenido bastante acogida por el personal privado de la libertad, ya que con mucha frecuencia hay certificaciones entregadas por diferentes cursos terminados”.

“Estamos cambiando vidas en el proceso de resocialización con el personal privado de la libertad. El Sena está presente en sus diversos programas de formación desde las actividades complementarias hasta [las] tituladas”, señaló el instructor Pedro Gómez, citado en el mismo documento, y quien junto a tres profesores lleva aproximadamente seis años formando a personas en ese centro penal.

También se indicó que “las estructuras de guaduas que actualmente se encuentran al interior del penal son diseñadas y construidas por los aprendices de los programas antes mencionados. Estas, a su vez, tienen diferentes usos como: en lo deportivo, se utilizan como camerinos; en lo administrativo, se utilizan como el lugar de encuentro de algunos guardas de seguridad y en los límites de algunos patios para reunión de los internos y recibir visitas”.

Más de 180 internos de la Picota se graduaron en el Sena en técnicas de madera. | Foto: SENA

“Estamos todos los muchachos muy agradecidos, los cuales venimos hace meses participando de los cursos; para nosotros es una forma de resocialización y demostrar que en la cárceles no solo hay gente mala, ni que tienen cosas negativas, sino que tenemos ganas de superación, de que queremos hacer cosas positivas en nuestras vidas y enderezarnos, y aceptar que en algún momento nuestras vidas no estuvieron bien encaminadas” dijo, por su parte, el interno y aprendiz José Edgar González.

Sena ha formado a 847 aprendices con discapacidad intelectual

Así mismo, el Centro de Gestión de Mercados, Logística y Tecnologías de la Información del Sena ha certificado a 847 aprendices con discapacidad intelectual en los programas: auxiliar de almacenamiento, empaque y embalaje de objetos, auxiliar de apoyo logístico en eventos, y servicios empresariales en la capital.

De acuerdo con la entidad, actualmente se trabaja en alianza con fundaciones aliadas que se encargan de realizar la gestión con el sector productivo para los contratos de aprendizaje y vínculos laborales, entre ellas: Best Buddies Colombia, Compesar, RECA, Centro de Atención de Discapacidad CADIS y más de 40 empresas del sector logístico como Alkosto, Cencosur, ACO alimentos, Éxito, Doria, Woden y muchas más.

El Centro de formación responde a la necesidad de la población con discapacidad intelectual, de acceder a la educación superior o formación para el trabajo, para potenciar sus capacidades y tener mayor oportunidad para vincularse laboralmente.

El Sena ha formado 847 aprendices con discapacidad intelectual | Foto: SENA

“Nos consideramos ganadores y actores a favor de la inclusión, gracias a que nuestro centro de formación es pionero en la formación a personas con discapacidad intelectual. Es necesario que se reconozca que hay personas diferentes funcionalmente, pero son las barreras impuestas por un entorno inadecuado las que les genera su condición de discapacidad intelectual”, indicó la coordinadora del programa, Keyla Karina González.

Son un total de 250 servidores directa o indirectamente del Sena se preparan para ofrecer un servicio de formación incluyente con calidad para cada uno de los aprendices que se vinculan con su formación técnica o tecnológica.

Por su parte, la instructora Mónica Cortés señaló que “aspectos relacionados con su independencia, comunicación, autodeterminación y mejoramiento en la calidad de vida de cada uno de ellos y sus familias es, sin lugar a duda, la mejor satisfacción y reconocimiento que pueda alcanzar un profesional que promueve procesos de inclusión”.

“Además, a través de esta formación se ha generado credibilidad con los empresarios del sector logístico con respecto a las capacidades de los aprendices con discapacidad intelectual como fuerza laboral que aporta en sus procesos productivos”, agregó.

Es el caso de José Alejandro Bayona Morales, aprendiz del Sena y quien actualmente estudia Auxiliar de almacenamiento, empaque y embalaje de objetos; él destacó que su “experiencia le ha cambiado la vida porque se siente útil, ha conseguido amigos y su familia lo motiva cada día para seguir adelante y desarrollar su proceso”.

Cabe resaltar que, de acuerdo con información del Dane, el 7,2 % de la población presenta alguna dificultad funcional para realizar sus actividades diarias, lo que se traduce en cerca de tres millones y medio de personas con una discapacidad, según el censo de 2020.