Finlandia es reconocida por tener uno de los mejores sistemas educativos del mundo, como avalan las diferentes evaluaciones internacionales en las que se mide la calidad. En las últimas Pruebas Pisa 2012, en la que se presentaron 65 países (Colombia entre ellos), a Finalndia sólo le superó Liechtenstein, Suiza, Países Bajos y Estonia. Pero, ¿qué hace tan exitosa la educación finlandesa?El cineasta estadounidense Michael Moore, director de los controvertidos largometrajes Fahrenheit 9/11 y Bowling for Columbine, responde a estos interrogantes en un documental de apenas 10 minutos que ya se ha hecho viral gracias al impulso de las redes sociales.
Son varios los elementos que garantizan el éxito de la educación finlandesa, como que el 90 % de los colegios son públicos y no realizan selección de estudiantes. Los niños se matriculan en la institución más cercana, donde se juntan compañeros de todas las condiciones sociales y en las que se les enseña a convivir sin discriminar. Los estudiantes aprenden a leer a los siete años, coincidiendo con el inicio de la escolaridad básica, y se estimula el concepto de socialización desde una edad temprana. Es un requisito imprescindible que los alumnos participen en las clases, y se brinda educación especial a los niños que van más rezagados. La metodología de aprendizaje se basa en la resolución de problemas, no en la repetición de conceptos para memorizarlos. En cuanto a las tareas, la idea es que los niños no se las lleven a casa, que las realicen durante el horario lectivo para que “tengan tiempo de disfrutar de la vida”, se indica en el video. Solo el 10 % de las tareas se realizan fuera de las cuatro paredes del colegio.Las actividades extracurriculares tienen un gran peso en la educación de los niños. Se potencia el aprendizaje de disciplinas artísticas y deportivas casi al mismo nivel que la formación formal. Quizá le interese: ‘Colombia debería dejar de imitar otros países‘. La profesión de docente es una de las más valoradas, respetadas y retribuidas: el salario inicial de un profesor finlandés de preescolar con formación mínima es de 27.443 euros al año (algo más de 85 millones de pesos). Pero no todo el mundo está habilitado a ejercer esta labor: es necesario tener un magíster en educación para lo que se exige tener unos promedios por encima de la media.