La hipótesis de Riemann fue formulada por primera vez en 1859 por el académico Bernhard Riemann. Es considerado uno de los problemas más importantes de la matemática contemporánea; tanto que el Instituto Clay de Matemáticas ofrece un millón de dólares a la primera persona que dé con la solución. Eso fue lo que hace más de cinco años el profesor Enoch, de la Universidad Federal de Oye Ekiti en Nigeria, se dispuso a hacer. No fue algo que se le ocurrió a él. "Un día unos estudiantes entraron a mi oficina y me propusieron resolver el problema", le cuenta Enoch a la BBC."Necesitaban dinero y querían que yo los ayudara a conseguir el premio de un millón de dólares del instituto de matemáticas en Estados Unidos". Pero Enoch asegura que el dinero no fue lo que lo motivó a pasar años intentando resolver el problema. "Fue el hecho de que mis estudiantes pensaron que yo podía ser esa primera persona", así que se dispuso a intentar resolver la hipótesis de Riemann. Momento eureka Hubo dos momentos importantes en que sintió que lo podía resolver. "Uno fue en una mañana de 2010 cuando di con un vínculo del problema. Ahí supe que me estaba acercando mucho".Otro fue dos años más tarde, cuando encontró la forma de aplicar lo que había descubierto hasta ese momento. Ahora este profesor asegura haberlo resuelto y, según el diario local Vanguard, la clave de su éxito se debe a la metodología que utilizó. "Enoch primero investigó y estableció las afirmaciones de Riemann". También revisó lo que otros matemáticos habían hecho en el pasado. Sin embargo, es el Instituto Clay el que debe revisar y decidir si en efecto, Enoch resolvió uno de los siete problemas del milenio que estableció para honrar las matemáticas en el nuevo milenio. Si se confirma que Enoch está en lo correcto, sería el segundo problema en resolverse. La existencia de Yang-Mills y el intervalo de masa, clases de complejidad P y NP, ecuaciones de Navier-Stokes, conjetura de Hodge, conjetura de Birch y Swinnerton-Dyer son los misterios pendientes de la matemática.