Aunque muchas personas se nieguen a aceptar que padecen un trastorno obsesivo compulsivo o TOC, esto termina impidiéndoles llevar una vida totalmente normal. Una enfermedad que en ocasiones es confundida con una obsesión, ya sea por el orden o la limpieza.

De acuerdo con los especialistas, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) tiene un patrón de pensamientos y miedos irracionales, los cuales hacen que las personas tengan comportamientos repetitivos, interfiriendo en sus actividades diarias y causando mucha angustia en ellas.

Una terapia a tiempo puede ayudar a una persona.

Por lo tanto, aunque muchos intenten ignorar o detener sus obsesiones, eso solo termina por aumentar la angustia y la ansiedad. En últimas, sienten la necesidad de realizar actos compulsivos para intentar aliviar el estrés, pero a pesar de los esfuerzos para ignorar o eliminar los pensamientos o necesidades que los molestan, estos vuelven una y otra vez produciendo un comportamiento ritualista y llegando al círculo vicioso del TOC.

Además, explican que el TOC se centra en determinados aspectos, como por ejemplo, el temor a contaminarse con gérmenes, por lo que una persona puede lavarse las manos compulsivamente hasta que estén doloridas y agrietadas, con el objetivo de aliviar el miedo a contaminarse. Aseguran que esta enfermedad generalmente se inicia en la adolescencia o en la juventud y sus síntomas suelen manifestarse de manera gradual y varían en cuanto a gravedad durante toda la vida y por lo general empeoran cuando sientes más estrés.

El TOC, considerado generalmente como un trastorno crónico, puede tener síntomas leves a moderados, o puede ser grave y prolongado. Respecto a sus causas, señalan que estas no se comprenden completamente, pero entre las principales teorías se encuentran tres: biológica, genética y entorno.

En cuanto a los síntomas de un trastorno obsesivo compulsivo o TOC, los especialistas explican que en general este incluye obsesiones y compulsiones, pero que también es posible tener solo síntomas de obsesión o solo síntomas de compulsión. De tal modo, una persona puede darse cuenta o no que sus obsesiones y compulsiones son excesivas o no razonables, si le quitan muchísimo tiempo e interfieren en su rutina diaria y en sus actividades sociales o laborales.

Los síntomas de un trastorno obsesivo compulsivo o TOC, en general incluye obsesiones y compulsiones.

Al hacer énfasis en los síntomas de obsesión, estos son pensamientos, impulsos o imágenes repetidos, persistentes e indeseados, que son invasivos y provocan angustia o ansiedad. Por ejemplo:

- Temor a contaminarse por tocar objetos que han tocado otros

- Dudas sobre si se puso llave a la puerta o si se apagó la estufa

- Estrés intenso cuando los objetos no están ordenados u orientados de una determinada manera

- Imágenes indeseadas e incómodas en las que se lastima o que lastima a otros

- Pensamientos sobre gritar obscenidades o actuar de manera inadecuada, los cuales son indeseados e incomodan

- Evasión de situaciones que pueden desencadenar obsesiones, como dar la mano

- Angustia acera de imágenes sexuales desagradables que se repiten en la mente

Entre tanto, los síntomas de compulsión del TOC son comportamientos repetitivos que la persona siente obligada a cumplir, y tiene como fin prevenir o reducir la ansiedad relacionada con las obsesiones o evitar que suceda algo malo.

Los especialistas recomiendan a las personas establecer reglas o rituales que ayuden a controlar la ansiedad cuando tengan pensamientos obsesivos.

Los signos y síntomas de la compulsión incluyen lo siguiente:

- Lavarse las manos hasta que la piel queda en carne viva.

- Verificar varias veces que las puertas están con llave.

- Verificar varias veces que la estufa está apagada.

- Contar siguiendo determinados patrones.

- Repetir en voz baja una plegaria, una palabra o una frase.

- Ordenar las latas de modo que estén orientadas hacia el mismo lado.

Los expertos también han aclarado que los pensamientos generados por el TOC no son simplemente preocupaciones excesivas sobre problemas reales de la vida ni preferir tener las cosas limpias u ordenadas de una manera específica y, que por el contrario, si las obsesiones y compulsiones empiezan a afectar la calidad de vida de la persona, es allí donde debe consultar con un profesional en salud mental.