Las fórmulas vicepresidenciales de los candidatos, asumieron el rol de protagonistas en campaña en el debate organizado por la alianza RCN TV y la revista SEMANA. Además de profundizar en los programas y las políticas de gobierno propuestas por sus respectivas campañas, reivindicaron sus nombramientos como aspirantes a la vicepresidencia y defendieron las posiciones de los candidatos en el Gran Debate trasmitido por el canal de televisión este jueves en la noche. Debido al formato del debate, las fórmulas vicepresidenciales tuvieron tiempo para controvertir y contra preguntar varias veces. En general, demostraron suficiente preparación. Los temas que generaron mayores réplicas y discusiones, fueron los derechos humanos y el TLC. Eso sí, fueron muy cautelosos a la hora de responder preguntas comprometedoras, como las orientadas a escudriñar por las eventuales alianzas políticas de cara a una segunda vuelta. ¿Por qué los eligieron?Angelino Garzón, formula vicepresidencial de La U, advirtió que a pesar que Juan Manuel Santos tiene orígenes sociales y políticos diferentes a los suyos, descartó cualquier retiro de su candidatura por el hecho de que algunos uribistas hayan cuestionado, y hasta rechazado, su designación. “Sólo Dios puede terminar esta unidad”, dijo. Una de las preguntas más agudas que tuvo que sortear fue la que cuestionó su cambio de postura frente a la posibilidad de un despeje. Garzón capoteó la situación al advertir que apoyó la propuesta de España, Francia y Suiza, de despejar Florida y Pradera (Valle del Cauca), porque heredó el drama del secuestro de los diputados. Pero advirtió que la respuesta de las Farc fue el asesinato de once de ellos. “la enseñanza que me quedó es que no se puede hacer ningún despeje (…) Si las Farc renuncian al secuestro, a la violencia, y piden perdón, el gobierno sería generoso para construir la paz”, dijo. Sergio Fajardo expresó su complacencia de ser la fórmula vicepresidenial de Antanas Mockus a pesar de que durante tres años recorrió el país con el objetivo de ser Presidente de la República. Argumentó que si llegaran al poder, las negociaciones con el Congreso de la República serán públicas, de frente, basadas en la democracia deliberativa y sin negociar lo público “los congresistas tendrán intereses, los invitamos a que los expongan por encima de la mesa”. Elsa Noguera, fórmula de Germán Vargas Lleras, de Cambio Radical, dijo que su nombramiento se debió principalmente a los resultados en la administración pública de Barranquilla y no a una estrategia del candidato para ganar el favor del voto costeño. “Ese modelo de gerencia, basado en principios éticos fue lo motivó mi nombramiento”, dijo. Defendió su experiencia en la capital de Atlántico como modelo para sanear las finanzas nacionales y orientar de forma adecuada el gasto público. Clara López Obregón, fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro, dijo que tras su nombramiento, se cumplió el propósito de unir al Polo Democrático. Argumentó que Petro la invitó a participar en la campaña por su compromiso con la defensa de los derechos de la mujer. Dentro de sus propósitos están, dijo: asegurar una mayor participación de género en los cargos del Estado, crear la figura del banco de la mujer y aumentar el salario de las madres comunitarias, entre otros. López no respondió a una pregunta que insinuó que su gestión en la Secretaría del Distrito estuvo salpicada de clientelismo. Aseguró que parte de los objetivos del DAS con las interceptaciones a la oposición era desprestigiar al Polo con señalamientos a la administración de Samuel Moreno de clientelista. Aníbal Gaviria, fórmula del candidato liberal, Rafael Pardo, explicó que la invitación a ser el vicepresidente fue coherente con los resultados de la consulta interna del Partido Liberal. Gaviria, ex gobernador de Antioquia, fue el segundo precandidato con mayor votación en la consulta. Ante la pregunta de por qué aceptó su designación, luego de que en la campaña hubiera criticado el apoyo del ex diputado César Pérez (condenado por la justicia por una contratación irregular) a Pardo, dijo: “Él ya no está en la campaña de Pardo, ahora está respaldando a Santos (…) quizás por eso es que ha bajado en las encuestas”. Luis Ernesto Mejía rechazó la afirmación de que su designación como fórmula de la candidata conservadora Noemí Sanín fue para ganar votos uribistas. Defendió “los resultados al frente del Ministerio de Minas en el gobierno del presidente Uribe y el conocimiento del Estado (…) Lo que buscó (la candidata) fue una coherencia con una ideología y una forma de gobierno”. La más polémicoEl TLC con Estados Unidos, los Derechos Humanos, y la reforma laboral fueron los temas de mayor controversia en el debate. Sobre el TLC, Elsa Noguera y Clara López coincidieron en que el Congreso de Estados Unidos no ha firmado el tratado a causa de la situación de los derechos humanos en Colombia. Angelino Garzón refutó esta afirmación y dijo que el hecho de que el TLC no se haya aprobado en el Congreso estadounidense se debe a una presión de sindicalistas norteamericanos a los que no les gustan los tratados de libre comercio. Clara López rechazó ese planteamiento y recordó que en la segunda mitad de esta década 47 sindicalistas fueron asesinados. A Luis Ernesto Mejía le preguntaron si admitiría que la Corte Penal Internacional investigara los “falsos positivos” (ejecuciones extrajudiciales) para establecer, entre otras, responsabilidades políticas de los altos funcionarios del Gobierno. El candidato argumentó que llevar los casos de derechos humanos ante la justicia internacional era admitir que el Estado colombiano fracasó en su intento de juzgar esos hechos. Reiteró en su intervención que “Colombia no es un Estado fallido”. Aníbal Gaviria, al contrario, dijo que si no avanzan las investigaciones de la justicia colombiana, estaba de acuerdo con el hecho de que sea la justicia internacional la que investigue esos hechos. Clara López recordó que la Relatoría para los derechos humanos de la ONU había advertido que los falsos positivos eran una práctica sistemática y por eso los había calificado de delitos de lesa humanidad. “La justicia colombiana no ha operado en esa dirección”. Angelino Garzón defendió el argumento de que los falsos positivos y las interceptaciones ilegales hechas por el organismo de inteligencia del Gobierno han ocurrido desde hace 20 años, que el actual gobierno obró bien al reconocer los hechos, pidió perdón y reclamó justicia. También mencionó que la ONU ha reconocido el esfuerzo y compromiso del Gobierno para erradicar las violaciones a los derechos humanos. Gaviria le replicó, y le pidió pruebas de que las interceptaciones ilegales son de vieja data. Garzón le respondió que cuando era sindicalista vivía “chuzado”, y que las desapariciones forzadas eran falsos positivos. Clara López señaló que el 64 por ciento de falsos positivos se incrementaron desde el 2002 y más aún desde el momento en que el Ministerio de Defensa emitió la circular “que ponía precio a las cabezas de los guerrilleros”. Cautela con las alianzas en segunda vuelta Al epílogo del debate, los periodistas intentaron explorar cómo serían las alianzas de cada uno de los candidatos en una eventual segunda vuelta. Las respuestas en general, fueron de excesiva prudencia. Elsa Noguera, Luis Ernesto Mejía y Aníbal Gaviria dijeron que con los partidos que acepten su programa. Sergio Fajardo y Angelino Garzón coincidieron en que sus campañas aspiran a ganar en la primera vuelta. Clara López reconoció la dificultad del Polo de sumarse a otros programas debido al predominio de modelos económicos neoliberales entre los demás candidatos. Sin embargo, indicó que la decencia y la legalidad tendrían el apoyo a la candidatura de Gustavo Petro. La alusión a la defensa de esos temas es una evidente demostración de apoyo a los verdes, en caso de que estos pasen a segunda vuelta. Los candidatos también defendieron sus capacidades para asumir la Presidencia, como lo ordena la Constitución en caso de que el Jefe de Estado tenga que marginarse del poder por incapacidad absoluta.