Cada vez más los colombianos compran por darse el gusto y no tanto por necesidad. Según datos de Raddar, los hogares realizan cerca de 6% de las compras por ‘capricho‘ y esta tendencia crece a medida que cuentan con mayores ingresos. A esto se une el aumento de la oferta de tiendas donde encuentran un sinnúmero de artículos curiosos y atractivos que, sin ser de primera necesidad, registran buenas ventas. Un ejemplo son las tiendas Miniso, que desde su llegada en 2018 no han parado de hacer funcionar sus máquinas registradoras. Recientemente Bogotá y otras ciudades como Medellín, Cali y Bucaramanga han presenciado la apertura de tiendas con formatos muy similares.

Tal es el caso de Yoi, una empresa colombiana que pertenece al grupo Pink Life, los dueños de Lili Pink. Desde febrero de este año ha experimentado un crecimiento orgánico bastante significativo en sus 26 tiendas en ciudades como Bogotá, Medellín y Bucaramanga, algunas de ellas dentro de los Almacenes Éxito. Con estas últimas ha logrado un aumento en ventas de hasta 10%. “Yoi nació de la necesidad en el mercado colombiano de tener productos de diseño a un precio asequible. Tenemos la meta de democratizar el diseño en elementos de decoración y papelería, entre otros, que se caracterizan en el mercado actual por ser un poco más costos de lo que planteamos nosotros”, afirma Diego Pérez, director de marca. Yoi maneja como concepto la cultura coreana y, por ello, entre sus productos se encuentran algunos exclusivos fabricados en este país asiático. También apuestan por apoyar a los emprendedores que ven en esta cultura una oportunidad de negocio. “Las fábricas están en Asia para ofrecer un mejor precio, pero el concepto, el diseño, etcétera son colombianos. Eso es lo más bonito de la marca”, afirma.

Yoi produce en Asia, pero trabaja con diseñadores colombianos. Cortesía. Por la misma línea está Magasin, una empresa 100% familiar que nació luego de que dos hermanos visitaron China y decidieron comercializar en Colombia productos como peluches, artículos para el hogar, juegos, etcétera. “La idea nació en esos viajes donde veíamos tiendas que manejaban los mismos productos que traíamos para vender al por mayor. Ahí vimos una oportunidad para implementar el formato en el país”, afirmó Santiago Zuluaga, CEO de Magasin.

Ese emprendimiento abrió su primera tienda en noviembre de 2018 y hoy cuenta con cuatro locales en los centros comerciales Multiplaza, Santa Fé y Plaza Claro. Allí manejan más de 800 referencias en categorías como belleza, juguetería, fantasía y bisutería, y los productos están en un rango de precios de entre $1.900 y $160.000.

Magasin tiene entre sus atractivos los productos de juguetería y la bisutería. Cortesía. Finalmente, está Lätt Liv, una cadena escandinava especializada en comercializar productos de estilo de vida, que aterrizó en el país en julio con un mensaje de ‘vida simple y fácil’. De acuerdo con Xiaowu Chen, representante de la marca en Colombia y Ecuador, esta cuenta con cerca de 4.000 variedades de productos de categorías como hogar, salud, tecnología, papelería, deportes y regalos. Lätt Liv abrió su primera tienda en China y actualmente tiene cerca de 1.000 alrededor del mundo. Chen asegura que diariamente esta marca vende más de $20 millones. “Queremos brindarles a nuestros clientes productos de calidad media y alta con precios justos, unido a un concepto de vida relajado, al estilo europeo”.

Lâtt Live significa ‘vida fácil‘ y está inspirada en el estilo europeo. Tiene sus tiendas en el norte de Bogotá. Cortesía. Aunque no revelaron cifras de su operación, estos tres casos han hecho evidente su éxito a través de su pronta expansión. A menos de un año de operaciones en el país, Magasin busca abrir dos tiendas más en 2019 y completar quince en 2020; Lätt Liv espera en tres años llegar a las 150 tiendas y Yoi este año tratará de cerrar con 40.

Adicional a esto, las tres empresas aseguran que el ecosistema en Colombia es ideal para su crecimiento, pues a pesar de tener a un gigante como gran competidor, ellos le están dando una alternativa diferente y novedosa para conseguir más productos y experiencias culturales diferentes. “Hay espacio para todo y no podemos pretender ser un Miniso ahora que estamos empezando. Hay que ser aterrizado con las cosas y las realidades”, menciona el director de marca de Yoi. De igual manera, aseguran que pese a la situación volátil del dólar no se han visto afectados gracias a sus planes de compras. “Tiene un efecto, claro, pero no es algo que sea muy grave. Nosotros manejamos las importaciones directas y hacemos un balance para que al final los precios sean los mejores para nuestros clientes”, afirma Zuluaga.