En la mañana de este lunes se conoció la muerte del empresario pereirano Alfredo Hoyos, luego de luchar contra una enfermedad durante varios años.  Hoyos, quien empezó como socio de la cadena Kokorico, vendió su parte a los otros accionistas y con este capital fundó en los años setenta la cadena Frisby, que se inició con una sucursal en el centro de Pereira y seis empleados. Vea también: El secreto de Frisby "es volver a emprender" Actualmente, Frisby cuenta con más de 200 puntos de venta en todo el país y emplea a más de 4.000 personas. Además, el empresario risaraldense también fundó otras importantes compañías en el país, como Pimpollo, Santa Inés, Impavicol, Pollo Loco, Procodes y Avícola del Pacífico. "Con inmenso pesar y con paz en el corazón, les contamos que nuestro querido cofundador, Alfredo Hoyos Mazuera, don Alfre, está en su proceso de trascender después de una lucha intensa contra una agresiva enfermedad. Está en el lugar que más ama, rodeado de mí, de sus hijos y sus nietos, y cuidado por un equipo de personas que han dado lo mejor para darle toda la comodidad y tranquilidad para que su partida sea tranquila y en paz", dice su esposa Liliana Restrepo a los empleados de la empresa, en una carta citada por Semana. Los inicios de Frisby En 1973, el empresario decidió vender su participación en Kokorico y Pimpollo; con ese dinero, algunos años después, y luego de casarse con su esposa Liliana, fundó Frisby, que en un principio fue una pizzería.  Lea también: Ecopetrol invertirá hasta US$4.000 millones en 2021 En este lugar, el concepto era el de las ‘arepas voladoras‘ y por eso su nombre. En la carta mencionada, Liliana Restrepo indicó que su "deseo y compromiso es seguir con su legado familiar y empresarial, y continuar haciendo de Frisby una empresa de la cual puedan seguir sintiéndose orgullosos todos sus colaboradores y todos los colombianos por sus prácticas de calidad, de compromiso con el medioambiente y la sociedad, y de prosperidad para todos".