Travis Kalanick, expresidente y cofundador de Uber, cortó de raíz sus lazos con la startup de reserva de vehículos. Así lo anunció esta semana la compañía asegurando que Kalanick renunciaría al consejo de administración de la firma el próximo 31 de diciembre. Según lo informado en un comunicado publicado por la compañía, el cofundador de Uber tomó la decisión para concentrarse en sus actividades actuales y sus iniciativas filantrópicas. “Uber formó parte de mi vida en estos diez últimos años. Al acabarse la década me pareció un buen momento para mí para concentrarme en mis actividades actuales y en mis iniciativas filantrópicas”, dijo Kalanick. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención de esta decisión es la venta de todas sus acciones, las cuales, según expertos, podrían alcanzar unos US$2.500 millones. Datos del portal Business Insider indican que esto representaría más del 90% de su participación.
Kalanick cofundó Uber en 2009 pero después de varios escándalos y una cultura laboral donde la discriminación y el acoso sexual regían la compañía, el directivo renunció en el 2017 como CEO de la startup. En marzo del 2018, Kalanick anunció la creación de un fondo de inversiones destinado a financiar proyectos con fines lucrativos y no lucrativos. Este - bautizado ‘10100’ (ten-one-hundred), se concentrará en los sectores inmobiliario, de comercio en línea y en proyectos innovadores en China e India, mientras los proyectos con fines no lucrativos tendrán relación con la educación y el futuro de las ciudades. También se sabe que actualmente el cofundador de Uber está trabajando en una startup de cocinas inteligentes para restaurantes llamada CloudKitchens y con la cual espera competir directamente con Uber. Incluso el diario estadounidense The Wall Street Journal informó que había recaudado en silencio cerca de US$400 millones.
Actualmente Uber enfrenta una serie de dificultades debido a la falta de regulación de su operación en algunos países de Europa y América Latina. Asimismo, se vio frente a una salida bastante difícil en la Bolsa de Nueva York ya que no ha logrado responder a las expectativas de los inversionistas y desde su debut reporta pérdidas superiores al 30% de su valor.