‘Lo que estoy pensando en esta Nochevieja’ así tituló su último blog del año el multimillonario y filántropo Bill Gates, en el que nuevamente hizo un llamado a que las personas ricas paguen impuestos más altos.  En la publicación, Gates aseguró que ha sido desproporcionadamente recompensado por el trabajo que ha realizado haciendo una fuerte crítica al sistema tributario estadounidense. “Los ricos deberían pagar más de lo que actualmente pagan, y eso incluye a Melinda y a mí. Hemos actualizado nuestro sistema tributario antes para mantenernos al día con los tiempos cambiantes, y tenemos que hacerlo nuevamente, comenzando por aumentar los impuestos a personas como yo”, escribió. También señaló la importancia de gastar de una manera inteligente el recaudo de impuestos para así poder construir un mundo "más saludable y equitativo para todos”. 

En el artículo Gates señaló una serie de argumentos del por qué debería aumentarse la carga impositiva a los multimillonarios en un país como Estados Unidos. Para el creador de Microsoft, el primero de ellos es la necesidad que tiene el gobierno del país norteamericano de recaudar más impuestos para cumplir con sus obligaciones, ya que recauda alrededor del 20% del PIB en impuestos, pero gasta cerca del 24%. “Y el costo de los compromisos está subiendo”, agregó.  Asimismo, considera que gravar y luego distribuir los ingresos podría ayudar a reducir la brecha de riqueza entre los ciudadanos más ricos y más pobres de ese país, cifra que se ha ampliado en el último medio siglo.  Otro punto que señala Gates es la necesidad trasladar la carga tributaria al capital y reducir el nivel de impuestos sobre el trabajo. “Hoy el gobierno de los Estados Unidos depende abrumadoramente de gravar la mano de obra: aproximadamente las tres cuartas partes de sus ingresos provienen de impuestos sobre sueldos y salarios. La mayoría de las personas obtienen casi todos sus ingresos del salario y el trabajo por hora, que se grava con un máximo del 37%. Pero los más ricos generalmente obtienen solo un pequeño porcentaje de sus ingresos de un salario; la mayor parte proviene de ganancias en inversiones, como acciones o bienes raíces, gravadas con un 20% si se mantienen durante más de un año”, explicó Gates. Y agregó “esa es la evidencia más clara que he visto de que el sistema no es justo. No veo ninguna razón para favorecer la riqueza sobre el trabajo como lo hacemos hoy”. 

También propuso aumentar el impuesto al patrimonio, asegurando que un sistema “dinástico” en el que puede transmitir una gran riqueza a sus hijos no es bueno para nadie y aseguró que esto genera que la próxima generación de las familias no tenga el mismo incentivo de trabajar duro y contribuir a la economía. “Es una de las muchas razones por las que Melinda y yo estamos devolviendo casi toda nuestra riqueza a la sociedad a través de nuestra fundación, en lugar de pasarla a nuestros hijos”, puntualizó.  Finalmente, otra de las preocupaciones que señaló Gates en su blog es la posibilidad de que el aumento de los impuestos desaliente el espíritu empresarial y la innovación. Al respecto, aseguró que esas no son preocupaciones reales frente a las tasas impositivas actuales. “No debemos destruir esos incentivos, pero ahora estamos muy lejos de ese punto. Los estadounidenses en el 1% superior pueden pagar mucho más antes de dejar de ir a trabajar o crear empleos”, aseveró. 

Ante esto, señaló que los impuestos más altos no fueron un obstáculo para que él fundara y construyera un negocio. “En la década de 1970, cuando Paul Allen y yo comenzamos Microsoft, las tasas impositivas marginales eran casi el doble de la tasa máxima de hoy. No perjudicó nuestro incentivo para construir una gran compañía”, acotó.  Gates tiene una fortuna valorada en US$113.000 millones, lo que lo ubica como la segunda persona más rica del mundo detrás de Jeff Bezos, fundador y CEO de Amazon, según datos del Índice de Multimillonarios de Bloomberg.