Este es el caso de Hermod, que está cumpliendo doce años ofreciendo al comercio y a usuarios de distintos sectores proveeduría de "sencillo", "menuda" o monedas y billetes de baja denominación. De acuerdo con Andrés Forero, gerente de la compañía, si bien es cierto que los pagos electrónicos y el comercio virtual se están imponiendo, en un país como Colombia, con elevados índices de informalidad y pobreza, para muchas personas es necesario contar con efectivo para dar las vueltas en las transacciones de pequeño valor que se siguen realizando. Esto es clave para el buen desempeño de sus negocios. “Estamos atendiendo a un segmento importante al que no llegan los canales tradicionales”, dijo Forero. Según el empresario, actualmente las personas o negocios que necesitan de billetes de baja denominación y monedas tienen que acudir o bien directamente al Banco de la República o bien a las transportadoras de valores que ofrecen este servicio, pero que no entregan montos pequeños. Lea también: Circulación de efectivo en Colombia siguió aumentando, pese a pandemia Hermod, que este año relanzó su servicio bajo la denominación “Más sencillo”, va al Banco de la República a adquirir billetes de baja denominación y monedas, luego las lleva a su centro de procesamiento en el occidente de Bogotá, organiza el dinero en función de lo requerido por sus clientes y se los lleva a los puntos donde es necesario el efectivo. Según Forero, en su portafolio de clientes se encuentran cadenas de almacenes y restaurantes como D1, McDonald‘s, Pan Pa’ Ya!, Goyur y hasta farmacias como Cruz Verde. “A una marca como McDonald’s le queda muy difícil enviar a alguien por sencillo al Banco de la Repùblica y luego distribuirlo por sus puntos. Por eso contrata este tipo de servicios”, señala Forero, quien insiste en que por tratarse de montos no tan altos, las transportadoras tradicionales no cubren todos los segmentos.
Estos paquetes de monedas son parte del portafolio de Hermod, que está relanzando su producto bajo el nombre de "Más sencillo". Estos "turros" o "cartuchos" de monedas son elaborados con una máquina importada del Japón. “A los bancos y a las transportadoras les interesan las altas denominaciones, porque en las transacciones financieras lo habitual es pedir billetes de $50.000. Por eso las bajas denominaciones no se irrigan al resto del comercio”, comentó. Para Forero, el “sencillo” es fundamental para el desarrollo de muchos negocios donde predominan hoy los pagos en efectivo como heladerías, cafeterías, ventas de calzado y ropa, notarías y restaurantes, inclusive las cadenas de franquicias. Recomendado: ¿Cómo reducimos el costo del uso de efectivo en la economía? Lo que entrega Hermod a sus clientes son kit de cambios con fajos de billetes de baja denominación y paquetes de monedas. “Hay que recordar lo problemático que resulta para muchos negocios que alguien pague, por ejemplo, con un billete de $50.000. Nuestro servicio resuelve esos problemas que afectan la operación del comercio”, dijo. Ahora están incursionando en el vending de efectivo: máquinas que se van a colocar en centros comerciales, para que otros comerciantes o cualquiera que lo necesite puede adquirir “sencillo” o “cambio”. Esas máquinas son importadas de Italia y se ensamblan en Colombia. “El efectivo -dijo el empresario- es necesario para mitigar la pobreza. Un país 100% bancarizado puede darse el lujo de eliminar el efectivo. Pero allá tienen un alto nivel de vida y de ingreso. Aquí la informalidad impide que muchos pasen a través del sistema financiero”. Forero ha evidenciado algunos signos de recuperación, porque luego de la paulatina apertura del comercio han venido solicitando cada vez más los servicios de la compañía. Actualmente, la firma mueve al día hasta $500 millones en efectivo en las ciudades de Bogotá, Medellín y Cali y cuenta con 60 empleados.