Coca-Cola anunció este viernes un plan de reestructuración que contempla el retiro voluntario de una parte de sus trabajadores en diferentes países. Este proceso puede costarle a la compañía entre US$350 millones y US$550 millones, y se da luego de que las ganancias en el segundo trimestre cayeran un 33%. El plan comenzaría con el retiro de 4.000 trabajadores en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico. La empresa reemplazará 17 unidades de negocio por divisiones nuevas y se enfocará en fortalecer nuevos productos y eliminar la duplicación de recursos. Coca-Cola espera optimizar su cartera y centrarse en las marcas más grandes y populares.
Cancele en cualquier momento