SEMANA: En los últimos meses se ha hablado del fortalecimiento del sistema eléctrico en el país. Justamente, este fin de semana habrá una inauguración de uno de esos proyectos eléctricos. ¿De qué se trata?
Diego Mesa: Este es un proyecto de Enerpereira. Es la granja solar Belmonte. Uno de los proyectos emblemáticos de Risaralda. Tiene una particularidad y es que es la primera vez que se instalan en un terreno montañoso en el país. Esto lo hace novedoso. Tiene unos seis megavatios de capacidad instalada y son más de 15.600 paneles solares los que se van a poner en esta granja. La inversión de este proyecto se acerca a los 22.000 millones de pesos. Otro tema para resaltar es la reducción de emisiones de CO2 que será de alrededor de 3.800 toneladas de gases de CO2 al año. Esto equivale a la siembra de 20.000 árboles. Es una muy buena noticia y complementa todo lo que se ha venido haciendo en Pereira, pues hay también varios sistemas de autogeneración, como en el aeropuerto o en la Universidad Tecnológica de Pereira.
SEMANA: Esta granja de Pereira es la primera que se construye sobre una cadena de montaña, ¿es correcto?
D.M.: Sí, es correcto. Estas granjas se hacen en terrenos planos más que todo en Meta, Valle, Bolívar o Córdoba. Esta es la primera que se ajustó a este tipo de terreno montañoso.
SEMANA: ¿Cuáles son los beneficios de utilizar estas granjas solares y cómo está Colombia en este frente?
D.M.: Uno de los componentes de la política de transición energética del Gobierno en este sector es la masificación de las energías renovables no convencionales. Y para eso implementamos y diseñamos un marco fiscal regulatorio y comercial para hacer más atractiva la inversión de este tipo de fuentes como la solar. Colombia tiene un potencial muy significativo en materia solar. Tiene una radiación en promedio, en todo el país, 60 por ciento superior al promedio mundial. Pero esto no estaba siendo explotado cuando llegamos al Gobierno en 2018. En ese momento, solo había dos proyectos de energías renovables no convencionales: un parque eólico y una sola granja solar en el Valle.
En este momento, solo en materia de granjas solares, tenemos cerca de 236 megavatios. Hay esperanzas grandes. Se vienen proyectos bastantes importantes en Sucre, Valle del Cauca, Atlántico y Bolívar. Yo creo que con respecto a los beneficios uno de los fundamentales es el tema de competitividad en cuanto al precio de la energía. Lo que demostramos en 2019 es que estos proyectos son mucho más competitivos en el costo del kilovatio. Logramos una reducción de aproximadamente 40 por ciento comparado con los contratos de ese momento.
SEMANA: Usted menciona que en 2018 solo había dos proyectos. ¿En este momento de cuántos estamos hablando?
D.M.: Hoy tenemos 15 granjas solares instaladas. Esto se complementa con grandes proyectos de autogeneración como los que ha ido implementando Ecopetrol, con los que tenemos más de 30 proyectos. Ya cuando uno se va a pequeños proyectos como una obra del aeropuerto de Pereira, el de Bogotá o los sistemas del Sena, hay más de 1.600 proyectos de autoconsumo con paneles solares.
SEMANA: ¿Por qué en Gobiernos anteriores no se había producido esta explotación al ritmo que debió hacerse?
D.M.: Algo que nos causaba curiosidad era que en 2014 se sancionó la Ley 1715. Esta ley fue la que trajo los incentivos para energías renovables no convencionales. Pero, cuando uno entraba en detalle, hacía falta hacer mejor la calibración de estos incentivos. Por ejemplo, restringía la entrada de fiadores nuevos. Entonces hicimos en el Plan de Desarrollo esa modificación y, posteriormente, con la ley de transición energética logramos hacer el cambio para que se ampliara. Hicimos la primera ciudad de energías renovables no convencionales en el país, y esto fue lo que nos permitió darles una mayor oportunidad a todos de participar en condiciones favorables.
SEMANA: Queda un año para que termine este Gobierno y hay en marcha varias obras encaminadas a la expansión energética. ¿Se implementarán otras más?
D.M.: Sí. La más importante que implementamos fue en el noroccidente, una que comprende los departamentos de Santander, Antioquia y Córdoba con una inversión millonaria que está en ejecución. También en los departamentos de la región Caribe. Estos proyectos están en diferentes etapas para que puedan empezar a operar en los próximos años.