SEMANA: Linda, usted es presentadora, modelo, fue reina de belleza en 2006 y ahora se mete en el mundo del doblaje, ¿cómo llega allá?

LINDA PALMA: Llegué por una invitación que me hicieron mis amigos de Warner. El año pasado me citaron a un casting para una película; no me dijeron mayor cosa, la verdad. Lo presenté porque nunca había tenido la oportunidad, me llamó la atención y decidí hacerlo, y mira. Me llamaron una segunda vez, ya me contaron qué personaje iba a ser, de qué se iba a tratar, supe que era una película de DC. Entonces me pareció brutal y volví a presentar otro casting a nivel latinoamericano. Tenía la posibilidad, pero había mucho talento de diferentes países. Me tranquilicé y dije: listo, si me va bien, perfecto; y si no, fue una experiencia chévere. Ya en la tercera llamada finalmente me dijeron: Linda, tú fuiste seleccionada como la única colombiana que va a hacer parte del reparto y tu papel es Linterna Verde. Estoy feliz explorando esto, es completamente nuevo para mí; pero, la verdad, fue muy divertido hacerlo.

SEMANA: ¿Cómo es el casting para un doblaje?

L.P.: Simplemente te ponen diferentes situaciones y tienes que ir hablando. Te dicen, más o menos, cómo es el personaje que irías a doblar. Uno habla e interpreta lo que ellos quieren, y ya. En otras ocasiones me mostraban imágenes y escenas del personaje, sobre eso íbamos elaborando la manera de hablar, qué debía hacer, si debía subirle a la entonación, a la emoción, hablar de una forma más tierna o hablar de una manera más brusca. Y así me iban guiando todo el tiempo.

SEMANA: Y cuando se entera de que su voz le daría vida al personaje de Linterna Verde, ¿qué sintió?

L.P.: Bueno, la verdad me llamó mucho la atención porque no soy la más experta y nunca había visto una Linterna Verde en una película. Es la primera película en la que vamos a ver una Linterna Verde mujer, y me pareció una oportunidad maravillosa. Tener esa oportunidad, después de estar compitiendo con tantos talentos de Latinoamérica, me llenó de mucha emoción.

SEMANA: ¿Cuánto tardó en hacer el doblaje de su personaje?

L.P.: Lo hicimos en un día, fue realmente sencillo, porque no tenía muchas líneas, no soy protagonista de la película; sin embargo, sí tengo la importancia de hacer parte de La Liga de la Justicia. Eso ya es una ganancia inmensa, pero los protagonistas de esta película son puntualmente las mascotas de los superhéroes, entonces, tuve pocas intervenciones, pero muy valiosas.

SEMANA: ¿Y con el acento cómo hizo?

L.P.: Lo bueno es que yo tengo el acento como muy neutral, o bueno, eso creo.

SEMANA: Pero a veces se le sale el barranquillero...

L.P.: Sí, cuando estoy en casa (...) imagínate, ya empecé a hablar medio costeño (risas), pero aquí tuve el acento superneutral. Ellos fueron muy claros en que querían que se supiera que era Linda Palma y no querían que sonara como presentadora. Es que si somos realistas, los presentadores de televisión tenemos cierto tonito que la gente diferencia inmediatamente. Eso fue complicado, creo que fue lo que más me costó, porque uno ya se acostumbra de alguna manera a hablar de esa forma.

Linda Palma Linterna Verde Liga Supermascotas | Foto: instagram @lindapalma

SEMANA: Y las otras personas que hicieron doblaje de dónde son, porque usted es la única colombiana...

L.P.: La mayoría son mexicanos, actores reconocidos de ese país. También algunos youtubers y, para los personajes protagonistas, sí son actores de doblaje que llevan años en esto.

SEMANA: En muchas partes gusta el español de los colombianos, de pronto eso ayudó, ¿no?

L.P.: Espero que así sea y que más adelante no sea solo una colombiana en la película sino muchas voces colombianas, porque a mi puntualmente me encanta el habladito de los colombianos, independientemente de la región de donde seamos. Me llama mucho la atención que cuando uno sale del país le dicen “me encanta tu hablado, por favor, habla más, tu acento es maravilloso”. A la gente le llama mucho la atención el acento de los colombianos, y ojalá se dé la oportunidad de que seamos muchos colombianos doblando diferentes películas.

SEMANA: ¿Cómo es el tema de darle voz y vida a un personaje?

L.P.: Es de alguna forma actuar a través de tu voz, lo que me parece aún más complicado, porque no soy actriz, y respeto muchísimo el trabajo de los actores. Al comienzo estuve muy tímida, la gente no creería, pero sí, me sentía como cohibida, no sabía por qué lado irme, pero estuve muy bien asesorada y con muy buenos guías durante todo el tiempo. Ellos me ponían las escenas y me decían “listo, en esta escena –porque yo no vi la película completa sino hasta hace una semana– va a pasar esto, el personaje viene de aquí”, y te van diciendo más o menos la situación general. Sobre eso tú vas actuando y ellos te van corrigiendo, si les gusta como va sonando, si se escucha muy fuerte la voz, y así es la dinámica.

SEMANA: Primera vez que presta su voz para un doblaje...

L.P.: Sí, primera vez.

SEMANA: ¿Y quiere continuar en este tema del doblaje?

L.P.: Me gustó mucho, me pareció muy divertido. Tengo claro que hay que estudiar, que prepararse, porque, como en todo, si uno quiere ser mejor hay que estar todo el tiempo capacitándose. De hecho, hablé en la escuela donde grabé acá en Bogotá, y la idea es empezar a estudiar, y veo que mi voz puede ser una herramienta más para seguir haciendo otras cosas adicionales a mi trabajo como presentadora.

SEMANA: Linda, mencionó que en el casting le dio pena. ¿Usted es tímida?

L.P.: Aunque muy poca gente me cree, yo soy tímida, toda la vida he sido tímida, y creo que la cámara y las pantallas me han ayudado para mejorar un poco eso. Pero si preguntan o hablan con amigas del colegio o de la universidad, darán fe de que siempre fui una mujer muy tímida, muy penosa en diferentes situaciones. Es parte de mi esencia también, y a pesar de los 15 años que llevo en televisión, si tú me dejas sola en este momento, siendo Linda Palma, en medio de un salón lleno de mucha gente que no conozco, vuelvo a ser igual de tímida que la niña del colegio.

SEMANA: Y esa niña tímida, porque cuando entró a la televisión era niña, ¿sufrió mucho?

L.P.: Fue porque yo nunca soy extrovertida. Mucha gente se imaginaría por mi trabajo todo lo contrario, entonces al comienzo fue difícil. Me ponían la pantalla y hablaba, pero detrás de cámara la vaina era más complicada porque volvía a ser yo, como que me encerraba en mi burbujita. Con el paso del tiempo sigo siendo tímida, pero obviamente ya en el canal llevo mucho tiempo trabajando, entonces, ya esa timidez se pierde, porque son mis amigos de toda la vida, mis compañeros con los que comparto a diario, ya uno va relajado.

SEMANA: ¿Cuántos años lleva en Caracol Televisión?

L.P.: En Caracol ya llevo diez años, y este año cumplo quince en televisión.

SEMANA: Usted estudió Ciencias Políticas. ¿Se graduó?

L.P.: No me gradué, quedé a dos semestres de graduarme.

SEMANA: ¿Pero podría retomar, o ya no?

L.P.: Podría retomar, no lo he hecho creo que por perezosa, porque tiempo hay para todo mientras uno se organice. La verdad, sí he sacado muchas excusas. Sin embargo, he hablado con varios decanos que han estado en la universidad y todos me reciben con las puertas abiertas para retomar y, obviamente, cerrar este ciclo tan importante de la vida que es la universidad. Espero graduarme, y los invito a todos.

SEMANA: ¿Qué otros proyectos vienen?

L.P.: En este momento estoy superjuiciosa con el tema de las redes sociales, por crear contenido que a mí me gustaría ver; estoy escribiendo por ahora un newsletter también, que me ha parecido maravilloso. Es un newsletter que mando a mis seguidores mensualmente y me parece importante. Es un espacio donde básicamente les hablo de diferentes experiencias que he tenido a lo largo del mes, les doy recomendados de sitios, cosas que me han gustado, música, libros, comida, viajes; mejor dicho, de todo.

SEMANA: ¿Cómo le ha ido de casada?

L.P.: Llevo un año y tres meses, y me ha ido superbien.

SEMANA: Pero ya llevaba de novia como once años, ¿no?

L.P.: Llevábamos diez años y medio de novios, ya llevábamos full tiempo; con Diego (Pulecio) me ha ido muy bien, gracias a Dios, estamos muy felices, tenemos muchos proyectos como esposos y esperemos que todo siga así, que sigamos creciendo juntos profesionalmente, espiritualmente y como personas.

SEMANA: ¿Sí es buen esposo?

L.P.: Sí, y me encanta, además. Él es superbuen esposo; cocina delicioso, entonces, me quita esa responsabilidad, es muy organizado y me ayuda mucho en la casa. Los dos nos balanceamos y mantenemos la casa muy organizada; es un hombre muy juicioso. La gente se imaginará que por ser un rockero es de llegar tarde a la casa, de rumbear mucho, pero es todo lo contrario. Es una persona que me ayuda a crecer todos los días; yo creo que es muy importante que uno tenga al lado a alguien que lo motive a crecer, a ser mejor todos los días.

SEMANA: Linda, usted tiene una condición médica que ha hecho pública y se la cuenta a sus seguidores constantemente para ser como referente. ¿Cómo ha estado de salud?

L.P.: Estoy muy bien, gracias a Dios. Efectivamente, soy muy juiciosa yendo a mis controles periódicos, el último examen fue en enero y me hicieron una resonancia magnética; afortunadamente, estoy muy bien. Las lesiones son estables, no hay nuevas en mi cerebro ni en otra parte del cuerpo. Siempre me cuido, trato de llevar hábitos alimenticios y físicos que me hagan bien. Además de los tratamientos médicos, uno puede hacer muchísimas cosas para estar bien y sentirse bien; en este momento, yo me siento bien, sana, de hecho, y supersaludable. Espero seguir así.

SEMANA: Además que muchas personas con su misma condición médica la ven como referente y lo importante es que, a pesar del diagnóstico, se puede llevar una vida totalmente normal...

L.P.: Así es, totalmente normal, gracias a Dios. Yo nunca he sido de excesos, nunca he disfrutado el trago, nunca he fumado, nunca he hecho muchas cosas que seguramente empeorarían la situación. Entonces esas son las recomendaciones más básicas: evitar excesos, tratar de llevar alguna rutina de ejercicios y de alimentación. Trato de correr, de hacer actividades que me den bienestar y, definitivamente, el cuerpo me agradece, y ya cuando uno se siente así de bien, entiende: listo, por ese lado es.