SEMANA: ¿Qué factores incidieron para la caída en el precio del dólar?
JOSÉ MANUEL RESTREPO: Es un fenómeno multicausal. No se puede caer en el simplismo de creer que la caída del dólar es por una sola razón. Hay unos componentes internacionales fuertes, arrancando por el mejor desempeño en materia de precios de los Estados Unidos, que evita la probabilidad de que la Reserva Federal eleve tasas de interés. Al suceder esto, evidentemente, motiva el movimiento de recursos de capital hacia países emergentes, incluso, de mayor nivel de riesgo, porque se eleva el apetito de riesgo. En segundo lugar, no puede tampoco uno dejar de reconocer el impacto que está teniendo el comportamiento de los precios del petróleo. Hay históricamente una correlación inversa entre el precio del petróleo y la tasa de cambio en Colombia. Y estamos viendo que ha habido un aumento en el precio del petróleo, por lo menos en el último mes, del orden del 12 por ciento, lo cual es significativo.
Hay que reconocerle un mérito al Gobierno en el sentido de que ha habido mejores mensajes con las cifras macroeconómicas. El crecimiento está siendo menos desacelerado de lo que se tenía previsto y el último indicador de seguimiento de actividad económica así lo demuestra. La inflación logró llegar a un tope y de alguna forma se le quebró el espinazo. Son mejores cifras en materia macroeconómica.
SEMANA: ¿Y en lo político?
J.R.: Se percibe un menor nivel de riesgo político, porque las reformas que tienen elementos críticos de cara al sector productivo o al empresarial han tenido dificultades en el Congreso. El mercado está reconociendo que hay una mayor capacidad institucional para mantener cierta estabilidad y apego a los modelos tradicionales de mercado. Ese escenario, sumado a todo lo que acabo de decir, está llevando a una caída en el precio internacional del dólar. Esto no es un fenómeno colombiano y eso confirma que el efecto internacional existe.
SEMANA: ¿La renuncia de Irene Vélez influyó?
J.R.: Creo que no, ese no es para mí un determinante. Es más, los mercados anticipan los rumores y este se tenía previsto de tiempo atrás. Creo, francamente, que la salida o entrada de un ministro no es un determinante sustantivo del comportamiento del dólar. Lo más importante es saber si en el futuro van a continuar firmándose contratos de exploración de gas y petróleo. Ahora, le reconozco el mérito al manejo de las cifras macroeconómicas del Gobierno, esas buenas cifras están animando la llegada de inversión al país y están de alguna manera minimizando los riesgos que eventualmente pudiesen haberse tenido anteriormente.
SEMANA: ¿El presidente Petro está corrigiendo el rumbo en temas económicos?
J.R.: No sé si el presidente Petro ha corregido el rumbo. Lo que creo es que la institucionalidad en Colombia ha operado, ha venido poniendo posiciones sobre algunas de esas reformas, corrigiendo o mitigándolas. Desde la cartera de Hacienda se han enviado mensajes sensatos sobre el manejo de la economía que han calado en los mercados internacionales. Hay que continuar en esto porque la confianza hay que construirla y mantenerla. Es importante continuar con esos mensajes de certidumbre para que esa confianza siga construyéndose. Yo le atribuiría un valor importante en la construcción de confianza en el país al papel que ha jugado la institucionalidad, que confirma por qué Colombia es el país que tiene la democracia más antigua y sólida de América Latina.
SEMANA: ¿La fluctuación del precio del dólar continuará a la baja?
J.R.: Con el arranque de la nueva legislatura es clave conocer los mensajes que enviará el Gobierno. Es importante el mensaje que envíe con decisiones de política pública, por ejemplo, alrededor del tema de la transición energética, para dónde va la reforma a la salud, la eventual nueva reforma laboral. ¿La reforma pensional se va a ir afinando en la discusión en el Congreso de la República para evitar que se terminen afectando los créditos e inversiones de largo plazo? Eso es importante respecto de la certidumbre que necesita la economía y, por ende, el impacto que esto puede tener sobre la tasa de cambio.
SEMANA: ¿Es decir que el dólar puede seguir bajando?
J.R.: De no existir tantas incertidumbres que se han generado en el país, hoy la tasa de cambio en Colombia debería estar en el orden de 3.500 pesos. Todavía seguimos estando un poquito más devaluados de lo que hubiese sucedido si hubiésemos seguido el mismo camino del resto de los países de América Latina, con la misma dosis de certidumbre. Por eso es que todavía existe un espacio de inquietud en los mercados respecto del devenir de estas reformas, tanto en el discurso del Gobierno nacional como en la posición de las instituciones del Estado.