SEMANA: ¿Qué opina sobre las declaraciones de Guillermo Alfonso Jaramillo, el nuevo ministro de Salud?
FERNANDO RUIZ: Son totalmente desafortunadas. Creo que el ministro no entendió la pandemia. Hace unas acusaciones sobre un uso inadecuado de las ucis en su departamento, pero como ministro le corresponde documentar y hablar sobre evidencia, no sobre supuestos que no puede corroborar. Hace un daño grandísimo al sector salud y la credibilidad del mismo. Es un golpe moral a miles de médicos, enfermeras, cientos de hospitales y clínicas que hicieron todo para atender a la población colombiana durante la pandemia.
SEMANA: ¿Está atacando al personal de la salud?
F.R.: Está tachándolos y poniéndolos en una posición inadecuada y desconociendo todo lo que hicieron por el país. La mortalidad que se presentó durante la pandemia en Colombia y la tasa de mortalidad está en el puesto 34 y es la menor entre todos los países de mediano y alto desarrollo en América Latina; y es menor que países más desarrollados, como el Reino Unido, Bélgica o Italia.
SEMANA: Lo que se le ha criticado al ministro Jaramillo es que lanzó acusaciones sin pruebas.
F.R.: Sí, un ministro no puede lanzar especies por lanzarlas, debe ser absolutamente consciente del daño que hace y debe saber que esta no será la última pandemia, vendrán otras y no puede enviar estos mensajes de debilidad y sin argumento alguno. Esto es supremamente grave porque para tratar de sustentar políticamente una reforma, que la mayoría de los colombianos siente que es absolutamente inconveniente, quiera hacer un profundo daño. El ministro de Salud debería estar más bien pensando en los efectos negativos que va a tener su reforma de la salud.
SEMANA: ¿El Gobierno Petro está usando la estrategia de que la mejor defensa es el ataque?
F.R.: Es una estrategia desesperada por demostrar que el sistema de salud es fallido y frente a la evidencia que todos los colombianos conocen de que el sistema los protege. Quieren justificar una reforma en la que les hace mucho daño y les perturba la percepción de la buena imagen que los colombianos tienen sobre su sistema de salud y su comportamiento durante la pandemia.
SEMANA: Sobre todo, porque muchos colombianos pasaron por una uci.
F.R.: Más de 60.000 colombianos pasaron por una uci. Si no hubiéramos ampliado las camas de cuidados intensivos, seguramente no habríamos podido atender más de 20.000. Cerca de 40.000 colombianos salvaron su vida gracias a la unidad de cuidados intensivos. Eso fue lo que se hizo durante la pandemia, salvar vidas bajo equidad.
SEMANA: A pesar de las diferencias ideológicas, los colombianos apoyaron la atención médica durante la pandemia.
F.R.: Sí, es que creo que lo que pretenden es dividir a los colombianos, y el ministro da unas declaraciones diciendo que lo que le interesan son los pobres. Eso es errado porque un sistema de salud no puede hacer diferencia y debe importarles todos por igual.
SEMANA: ¿La pandemia demostró que en la enfermedad todos son iguales?
F.R.: Los colombianos sintieron que tuvieron la misma oportunidad de acceso para la vacunación sin importar estrato ni nada de eso, lo único es que tenían prioridad los de más riesgo. Hablar esto en retrospectiva y sin evidencia no tiene sentido. El ministro Jaramillo tiene un discurso político y es un desacierto total.
SEMANA: Decían que el palo en la rueda era Carolina Corcho, pero el ministro Jaramillo se estrenó con esas frases. ¿Se seguirá en lo mismo?
F.R.: Todos tenemos muchas expectativas de que el ministro, siendo médico, una persona experimentada y con recorrido político, tuviera una visión realmente mucho más equilibrada. Aspiro a que esto solo sea un desatino, pero realmente creo que lo que debe tener este ministro es una presión inmensa por pasar una reforma que es totalmente impopular. Es una reforma sin rumbo y sin sentido.