El edificio a punto de desplomarse La semana pasada el presidente de la Corte Constitucional advirtió que en el Palacio de Justicia, literalmente, no cabe una tutela más y que existe el riesgo de que la edificación se desplome por el peso de los expedientes acumulados. No hay quién trabaje La Justicia acaba de sufrir otro golpe mortal: la eliminación de los cargos de descongestión. Si ese problema no se soluciona, en la Corte Constitucional 76 de los 177 empleados saldrían de su puesto. En total la rama judicial perdería a 5.000 funcionarios. Las audiencias bon-bril El ministro de Justicia, Yesid Reyes, propuso eliminar la obligación de leer todos los documentos en las audiencias orales. Esto ha hecho que en casos que tienen toneladas de papeles como el carrusel de la contratación, Interbolsa y el desfalco de la Dian, diligencias que deberían tomar media hora, tarden meses. Hoy no, mejor mañana A la mitad de las audiencias no llegan los abogados. El caso de la muerte del joven grafitero, por ejemplo, se ha aplazado 14 veces. Según el Consejo Superior de la Judicatura de 163.819 audiencias penales programadas, solo 83.911 se realizaron. El ministro Reyes propuso un sistema tecnológico que impida que un jurista tenga dos citas al mismo tiempo en juzgados distintos. Inocentes y presos Las cárceles, a donde solo deberían llegar las personas condenadas, está llena de personas esperando su juicio. Actualmente, de los casi 130.000 presos que tiene el país, 41.000 no han sido condenados. No hay principio de oportunidad La meta del sistema penal oral era que más de la mitad de los procesos terminaran por cuenta de la posibilidad que tiene la Fiscalía de negociar con los acusados. Sin embargo, hoy solamente se utiliza el principio de oportunidad en 0,2 por ciento de los casos, según un informe de la Corporación Excelencia en la Justicia.