La justicia brasileña autorizó el viernes la libertad del expresidente socialista Luiz Inácio Lula da Silva. Desde abril de 2018, Lula cumplía una condena de 8 años y 10 meses en una cárcel de Curitiba, por el escándalo de corrupción Lava Jato. Pero el juez que condujo su caso determinó que ya “no existen fundamentos para la ejecución de la sentencia”, una medida que, por supuesto, no estuvo libre de polémicas. Cientos de seguidores recibieron el anuncio con gritos de “Lula, guerrero del pueblo brasilero”. Pero otros, como Carlos Bolsonaro, concejal e hijo del actual presidente, no dudaron en trinar contra su liberación: “Miles de presos serán liberados y generarán graves consecuencias”. Y es que en algo tiene razón. La Corte Suprema está revisando el caso de 5.000 personas más, entre ellas la exnovia de Lula, que “presuntamente fueron encarceladas por razones políticas”. No hay que olvidar que el diario The Intercept acusó de parcialidad a Sergio Moro, el juez principal de Lava Jato, lo que parece confirmado en el hecho de que hoy es el ministro de Justicia de Bolsonaro. El caso es que si Lula decide retomar su carrera, pondrá en aprietos al presidente. La paradoja está en que, según los analistas, la libertad de Lula fortalecerá al Partido de los Trabajadores, pero también a Bolsonaro, “que supo captar el odio de una parte del electorado contra el exlíder sindical. Él puede capitalizar ese odio y reforzar la polarización nacional”. Otra visión de país

La consultora McKinsey & Company cumple 25 años en Colombia y, para celebrarlo, publicó Reimaginando a Colombia, un libro en el que 44 plumas se le midieron a la tarea de mirar al país en prospectiva para pensar en una Colombia mejor. En esta iniciativa, que McKinsey también ha desarrollado en Japón, India, Sudáfrica y Argentina, participaron los presidentes de Ecopetrol, Felipe Bayón; de Colombina, César Caicedo; de Publicaciones Semana, María López, y la cabeza del Grupo Santo Domingo, Alejandro Santo Domingo. Varios artistas, como Juanes y Carlos Vives, dejaron sus ideas de futuro, al igual que los deportistas Mario Alberto Yepes y Sofía Gómez. La obra resalta los avances que ha logrado la Nación en los últimos años con el fin de evidenciar que sí es posible el cambio y que solo necesita generar confianza. Interbolsa, siete años después El primero de noviembre se cumplieron siete años de la intervención de Interbolsa, un millonario desfalco que superó los 600.000 millones de pesos y del cual todavía no ha podido recuperarse el mercado de valores. ¿Cómo es la situación judicial de los principales implicados en este escándalo? Rodrigo Jaramillo. El expresidente de la firma comisionista recibió una pena de siete años de prisión, que cumplió en su casa. Según las víctimas, no ha devuelto el dinero de forma voluntaria.

Juan Carlos Ortiz y Tomás Jaramillo. Los principales directivos y accionistas del fondo Premium fueron condenados a una pena de 71 meses. Ante la apelación de sus víctimas, la sentencia aumentó a 13 años. La fuerte sanción se encuentra pendiente de trámite ante la Corte Suprema. Quedaron beneficiados con prisión domiciliaria y han devuelto sumas insignificantes dentro de su acuerdo con la Fiscalía.

Víctor Maldonado. El juicio del principal accionista de Interbolsa ni siquiera se ha iniciado, pues el proceso se encuentra pendiente de la admisión de las pruebas para su práctica en la audiencia. Su defensa solicitará el testimonio de varios centenares de víctimas de la estafa, lo que conducirá a una muy probable prescripción de los delitos. Vea el informe completo en la próxima edición de Dinero.