Nacida en Bagdad, estudió matemáticas en Beirut y se instaló con 20 años en Inglaterra, donde, bajo el auspicio del holandés Rem Koolhaas y convencida de que una construcción siempre debe “alimentar el alma”, dio a luz una obra majestuosa. Su estilo transgresor, definido por las curvas, está en una docena de países del mundo, entre otras en edificaciones como el Centro Heydar Aliyev en Bakú, Azerbaiyán; el Museo Messner Mountain en Corones, Italia, y la Ópera de Cantón, en China.