La pandemia ha contribuido al sedentarismo y a malos hábitos alimenticios, lo que pronostica que, si no se aceleran los planes de prevención y atención, así como el autocuidado, más de la mitad de la población en el país seguirá aumentando peso.

Tanto el sobrepeso como la obesidad son responsables de otras enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, diabetes, cáncer, derrame cerebral e infartos.