Entre los mecanismos o alternativas que las entidades bancarias ofrecen se encuentra la posibilidad de abrir una cuenta de ahorros, con la que se puede depositar o retirar dinero.
No todas las cuentas son iguales, ya que esto depende del banco que las ofrece. Asimismo, es importante mencionar que al momento de querer acceder a esta opción financiera es necesario determinar el por qué de esta decisión, el cual podría ser para comenzar a tener vida crediticia o pagar deudas.
Sea cual sea el caso, los expertos en salud financiera dicen que hay que controlar el producto de la cuenta de ahorros, el cual suele ser proporcionado mediante una tarjeta débito. Teniendo en cuenta recomendaciones dadas por el blog educativo Saber más Ser más, una cuenta de ahorros es una elección, por lo que si no se aprende acerca de ello puede traer consecuencias para el futuro.
En ese orden de ideas, antes de dar el paso de la generación de la cuenta, hay que ajustarse a las necesidades, es decir, “asegurarse en primera medida de obtener la mayor cantidad de información sobre la cuenta por adelantado”.
Entre los gastos que puede representar el hecho de obtener una cuenta de ahorros se encuentran:
- Pago del 4x1000: descuento que se hace por retiro de cajero o pagos en líneas, según la tarjeta que el banco proporcione.
- Costo de apertura de la cuenta.
- Cobro por consulta de saldo en cajeros.
- Cobro por transferencias de dinero entre cuentas.
- Cuota de manejo de la cuenta.
En ese sentido, si bien, la cuenta de ahorros es una herramienta para acumular dinero, lo cierto es que también puede representar un pago por tenerla activa. Por lo tanto, el hecho de obtener esta alternativa no siempre es la mejor idea para todas las personas.
No siempre hay que recurrir a una cuenta de ahorros
Hoy en día, las redes sociales se posicionaron hasta el punto en el que abundan contenidos de todo tipo, entre ellos de finanzas personales, enfocados en el ámbito del ahorro y la inversión.
Precisamente, en TikTok la cuenta de @mispropiasfinanzas cuenta con expertos en el área y, en uno de sus recientes videos, se da a conocer información en la que se indica el por qué no siempre hay que recurrir a la cuentas de ahorros.
Una de las razones que indican los conocedores del tema es que la rentabilidad de esta alternativa financiera no da retribuciones, es decir, no hay una ganancia de por medio. De hecho, recalcan que “es casi como tener la plata debajo de un colchón”, aunque cabe precisar que, por eso, es necesario comparar las entidades bancarias para tomar la mejor decisión y evitar lamentos económicos.
Así las cosas, el citado perfil recomienda que si la persona busca ahorrar debe apuntarle al factor de la rentabilidad, algo que no sería tan factible en las cuentas de ahorros; ya que por lo general esta herramienta es utilizada para el pago de salarios, recibos públicos, entre otras acciones.
De esta forma, tanto en Banco de la República, como los mismos especialistas, recalcan que ahorrar es un asunto de responsabilidad y seguridad. Por lo tanto, si la persona no tiene la necesidad de gastarse el dinero puede optar por otras opciones como un CDT o un Fondo de Inversión Colectiva (FIC).
Asimismo, existe la opción de aquellos que prefieren ahorrar con la moneda de los Estados Unidos (dólares) o con metales preciosos como el oro, ya que estos activos “históricamente han sido muy seguros. La gente prefiere ahorrar en estos activos porque tener el dinero quieto en una cuenta de ahorros” puede llegar a no ser el mejor negocio, según la perspectiva y la necesidad que tenga la persona.