En la actualidad, el ahorro es un tema clave para los colombianos. Tener hábitos financieros saludables es fundamental para mantener el bienestar económico.
De acuerdo con un informe del Banco Caja Social, con unas buenas prácticas de ahorro y gasto responsable se puede alcanzar una calidad de vida adecuada.
Según explicaron, unas finanzas saludables son aquellas en las que los egresos e ingresos están equilibrados, además de que se pueden cubrir las necesidades básicas, pero también alcanzar metas personales, progresar económicamente y contar con respaldo para cualquier imprevisto.
Para lograrlo hay que tener en cuenta algunos hábitos financieros positivos, pues si la persona es constante y disciplinado, puede mejorar mucho la situación financiera.
Los gastos hormiga y el presupuesto
Particularmente, están los gastos hormiga, que son uno de los tipos de gastos más peligrosos para el bolsillo, especialmente porque pasan desapercibidos. Casi nadie los registra porque son pequeños, pero, sin embargo, si se tienen todos los días pueden llevarse mucho dinero cada mes, como por ejemplo son el tinto, el periódico, galguerías o viajes en taxi.
Agregó el informe que para tomar conciencia de esos gastos, hay que empezar por identificarlos y anotarlos.
Por otra parte, según dieron a conocer en Nequi, es clave tener un presupuesto. Hay que tener en cuenta que todas las personas tienen diferentes tipos de gastos a lo largo del mes, como los gastos fijos, cosas que hay que pagar obligatoriamente cada mes, como la comida, los servicios públicos, o la renta; los gastos variables, en los que puede decidir, como la mesada o salir con sus amigos los fines de semana; o el ahorro, que es obligatorio si se desea proyectar la vida hacia algo más que vivir el día a día.
En tal sentido, hay que dividir los gastos en estos tres tipos y compararlos con los ingresos para ver cuánto le queda libre y así se sabrá cómo optimizarlos. Saber cuánto gasta es el primer paso para cuidar su plata en tiempos de inflación.
De esta manera se podrán identificar los comportamientos que llevan a malgastar el sueldo. Por ejemplo, las tendencias en los gastos, si se suele gastar más los sábados o a comienzos de cada quincena; o los gastos emocionales, cosas que compra cuando se está triste o ansioso y que lo descuadran en su presupuesto.
Con esta lista se podrán tomar mejores decisiones en las finanzas. Por ejemplo, cambiar el café de afuera por un pocillo con su propio café casero, comprar las onces o golosinas cuando se haga mercado para que resulte más económico y no gastar plata a diario en ello.
Es importante buscar blindarse emocionalmente de los momentos en los que sale a gastar todo su dinero y comprar cosas sin pensar en los demás gastos que vienen.
Además, en tiempos de inflación, compartir es una decisión inteligente, y se puede salir de todas aquellas suscripciones a servicios que no se está utilizando.
Por ejemplo, se puede compartir suscripciones a servicios de streaming o de almacenamiento en la nube, o si se tienen varias suscripciones de video, se pueden rotar y usar una plataforma por mes.
Además, se puede armar estrategias para ahorrar servicios públicos, evitar los cargadores de dispositivos electrónicos conectados sin un propósito, dejar bien cerrada la nevera, ducharse en menos tiempo y lavar la ropa en procesos ecológicos de la lavadora o reciclar el agua que esta emplea.
En la medida de lo posible, compartir el carro, use bicicleta o transporte público. O si hay alternativas más baratas de transporte, evite el uso de carro.