Muchas personas suelen decir que el dinero no les alcanza por los múltiples gastos que se tienen al mes, al año y, en especial, a diario. El arriendo de la vivienda, los servicios públicos, los pasajes para transportarse al trabajo y el mercado son algunos de los gastos importantes que se tienen cada mes. Estos son gastos que están destinados a un fin: tener un bienestar y una buena calidad de vida. Es dinero que se convierte en obligatorio para cubrir las necesidades básicas.

Gastos innecesarios | Foto: Peter Cade

Una de las razones por las que las personas no pueden ahorrar es porque no organizan sus gastos diarios, mensuales y anuales. La planificación del destino del dinero que se gana es importante para conocer las posibilidades de gastos, ahorros e inversión. Cuando se realizan compras impulsivas o se accede a servicios que no cubren el sueldo mensual, ocurre un desequilibrio en las finanzas personales. La organización permite conocer qué dinero restante se puede utilizar para gastos no necesarios y caprichos.

Además de la falta de orden en la vida económica, los gastos innecesarios son un enemigo directo del ahorro. Conocidos como “gastos hormiga”, son aquellas compras pequeñas que ni siquiera se consideran un gasto por su cantidad mínima de desembolso de dinero. Como representan un gasto insignificante, las personas lo hacen varias veces al día.

Por ejemplo, comprar café o bebidas a diario, comprar varias botellas de agua al día o snacks para comer durante la jornada. La compra individual de esos productos no suma una gran cantidad de dinero, pero si se juntan sus costos representan un porcentaje grande desembolso de dinero.

Los gastos hormiga no son perceptibles al ojo de las personas. Por eso es importante conocer cuáles son y empezar a ahorrar. Además de las compras impulsivas y evitar caprichos innecesarios, hay muchos gastos hormiga que no conocemos. Business Insider, sitio web sobre economía, señala otros gastos hormiga que se deben tener en cuenta:

¿Cuáles son los gastos que se deben evitar?

  • Agua: evitar comprarla en botellas de plástico. Hoy en día se puede contribuir a cuidar el medioambiente utilizando un termo. Es una opción amigable con el bolsillo y con el medioambiente.
  • Café: elimina las tazas de café diarias. Se puede comprar café para hacer en casa y tener materia prima para prepararlo hasta por un mes.
  • Snacks: el consumo excesivo de dulces es malo para la salud. Si se quiere consumir snacks para merendar durante el día, se pueden comprar alimentos como maní, quinoa, frutos secos, etc. Lo ideal es no comprar por fuera y utilizar los productos de la canasta familiar.
  • Almuerzo: aunque las jornadas laborales inician muy temprano y finalizan tarde, no hay excusa para cocinar en casa y llevar almuerzo al lugar de trabajo. Almorzar en restaurantes aumenta en gran manera los gastos innecesarios.
  • Plataformas de ‘streaming’: con el mundo digital, las plataformas de streaming cada vez son más populares. Netflix, Amazon Prime, HBO, Disney Plus, entre otras, son un gasto pequeño que puede ser eliminado si no se usa con frecuencia. Algunas personas pagan estos servicios de contenido y no la utilizan periódicamente, por lo que es dinero que se convierte en un gasto y no en una inversión. Antes de pagar por alguna de ellas es importante reflexionar si es indispensable o no.
  • Intereses o saldos en mora: cuando no se realizan a tiempo los pagos de tarjeta de créditos o de otros servicios, se pueden generar cobros adicionales por la impuntualidad del pago. Por esto, es importante la organización en la economía personal.