Una de las etapas más productivas de un ser humano suele ser cuando este se encuentra entre los 20 y 30 años, pues en esta edad, la mayoría de los humanos goza de buena salud y cuenta con mayores capacidades para realizar diferentes tareas.
Sin embargo, en dicha época también es común que los salarios no sean tan altos, pues generalmente quienes se incorporan a trabajar son hasta ahora aprendices o están probando su segundo trabajo.
Pese a esas condiciones, si los jóvenes realizan una planeación financiera correcta, desde muy pequeños podrán empezar a formar su capital para que cuando sean adultos la tengan más fácil al solicitar créditos.
Tips para que los jóvenes manejen mejor sus finanzas
Finanzas desordenadas = poca libertad
Uno de los consejos más importantes y que todo joven debería seguir es el de crear un presupuesto. Aunque no lo crea, esto es importante para conseguir la independencia financiera que desea. Esto permite tener un mayor control sobre los ingresos y los gastos.
El hecho de poder viajar con amigos, disfrutar de una buena rumba o hasta comerse una hamburguesa dependerá de qué tan ordenado y poco derrochador sea con su presupuesto.
Es mejor que ordene el dinero que destina para transporte, material de estudio, parqueaderos, tiempo de entretenimiento, entre otros rubros. Así evitará gastar de más.
Evite premiarse a sí mismo con la excusa de que “lo merece”
Los jóvenes tienden a justificar ciertos gastos de su día a día asegurando que hicieron un esfuerzo arduo para conseguir el dinero, por lo que pueden obtener pequeñas recompensas, traducidas en vicios, artículos tecnológicos y otros. Aunque puede hacerlo una o dos veces, si lo convierte en una costumbre, su bolsillo se verá gravemente afectado.
Evite mecatearse la platica y empezar a tapar huecos con préstamos
Otra estrategia muy común que los universitarios y los jóvenes tienen para evitar quedarse sin plata es utilizar su tarjeta de crédito. Ya sea amparada o propia, este producto crediticio debe ser concebido como un beneficio para aumentar su score crediticio, y no como un producto para utilizar en compras a cada rato.
Qué otros consejos debería seguir para cuidar el bolsillo
Una forma efectiva de controlar nuestros gastos es preparar los alimentos en casa en lugar de comer fuera con regularidad. Al cocinar en casa, podemos medir nuestros gastos de manera más precisa y ajustar nuestro presupuesto de comida. Para hacerlo, es recomendable hacer una lista de menús diarios de la semana y comprar solo los productos necesarios en el supermercado. También es importante revisar las fechas de vencimiento de los alimentos para evitar desperdicios innecesarios. Al adquirir una canasta básica según nuestras necesidades y tamaño de la familia, estaremos gastando de manera más consciente y moderada.
La llegada de la prima de mitad de año representa una oportunidad para cuidar nuestras finanzas y tomar decisiones responsables. Siguiendo estos consejos prácticos, podremos maximizar el valor de nuestra prima, evitar gastos innecesarios y fomentar el ahorro. Recuerda que la preparación y la planificación son clave para administrar eficientemente nuestros recursos económicos.
Según los expertos en finanzas, uno de los errores más comunes al recibir la prima de mitad de año es no diferenciar entre gasto e inversión. David Aponte, Contador Público especializado en Finanzas, destaca que la prima es un ahorro acumulado por la empresa y puede ser utilizado como motor de inversión.
Para aprovechar de manera adecuada este ahorro, se sugiere destinar al menos el 50 % de la prima a un proyecto de inversión, ya sea iniciar un negocio, adquirir una vivienda o pagar la matrícula universitaria. Esta opción permite que la prima genere frutos y se convierta en una inversión sólida.