El 2023 está a la vuelta de la esquina, por lo que muchos sectores ya comienzan a hacer balances. Es caso del ecosistema de pagos y transacciones en Latinoamérica y cómo están cambiando los hábitos y preferencias del consumidor final para atender sus necesidades financieras.

De acuerdo con Mauricio Fernández, director de operaciones Américas de BPC, “el sistema de pagos de la región es dinámico, activo y continúa con su proceso de transformación. La tecnología es el gran impulsor de soluciones digitales que hoy proponen un cambio en la forma como las instituciones financieras y de procesamiento de pagos se relacionan con sus clientes”.

Destacó que, según el informe Payments 2025 & Beyond realizado por PwC, se espera que para 2030 los pagos electrónicos en el mundo se tripliquen y superen los tres billones de operaciones.

Las tendencias de 2022

Fernández destacó cuáles fueron las tendencias principales de pago en América Latina en 2022. Por un lado, está el tema de las finanzas abiertas, en la que se define una experiencia para que cada industria pueda ofrecer a sus clientes.

Dicho modelo promueve un concepto más amplio de lo que son los servicios financieros tradicionales, en donde se crean experiencias como puede ser la integración de cuentas, poder realizar ventas cruzadas, manejo de cartera, programas de fidelización y respuestas en tiempo real.

Según el experto, “Latinoamérica avanza en la creación de una regulación que estimule la participación de los diferentes actores del ecosistema financiero; países como México, Colombia y Chile ya cuentan con modelo de Ley Fintech, que además de establecer un marco regulatorio para ciertos servicios con una base tecnológica, transfiere beneficios para los usuarios como pueden ser la disminución en los precios; la creación de productos personalizados y la inclusión de nuevo actores y métodos transaccionales”.

En cuanto a las billeteras digitales, su apropiación en la población permite realizar transferencias de persona a persona (P2P), envío y recepción de fondos, compra de productos y servicios, pagos de servicios y recargas telefónicas, todo desde una única aplicación.

También están las soluciones en La Nube. En este punto, la banca tradicional, las fintech y los neobancos que adoptan tecnologías como SaaS (Software as a Service), consiguen crear una plataforma propia para ofrecer productos y servicios digitales, donde se pueden actualizar soluciones y lanzarlas al mercado a gran velocidad, promoviendo la innovación en sus herramientas.

Aseveró Fernández que “cualquier SaaS, servicio de pagos, tarjetas digitales o empresas de tecnología financiera requiere contar con algo más que el uso de la tecnología para llegar a sus clientes. Necesitan el soporte de un experto en procesamiento de pagos, servicios de banco y tener las conexiones y alianzas adecuadas con los comercios locales. La utilización de La Nube elimina la fricción y facilita la implementación de plataformas modernas en tiempo real y con alta disponibilidad”.

En cuanto al método conocido como Compre ahora y pague después (Buy Now, Pay Later) permite a los usuarios realizar transacciones y adquirir los productos inmediatamente, con la posibilidad de realizar el pago fraccionado posteriormente, sin intereses.

Según el informe Impulsores del Cambio en los Pagos: Modernización de los Pagos para crear un nuevo valor, de BPC, se prevé que este modelo alcance los $3,98 billones en el mundo.

El experto no olvidó las tarjetas contactless. El uso de la nueva generación de este método de pago son una alternativa digital a la tarjeta bancaria física y tradicional, y que permite realizar transacciones en comercios, no solo es fácil de usar y expedir por partes de las instituciones financieras, sino que ayuda a prevenir el fraude debido a que se encuentre basado en la norma de Seguridad de Datos para la Industria de Tarjeta de Pago (PCI DSS), entre otras tendencias.