Llegar a fin de mes puede ser toda una odisea, sobre todo cuando las deudas están ‘respirándoles detrás de la nuca’ a las personas. Estas obligaciones pendientes son gastos que deben ser considerados dentro del presupuesto, debido a que demandan una porción de los ingresos.

Al tratar de resolver esta situación, es posible que se cometan otros errores que desajusten el bolsillo, inclusive más de lo que estaba al principio. Por ello, los expertos en el tema detallan algunas de estas equivocaciones que se deben evitar para no poner en riesgo la libertad económica.

Una regla básica que aplica en la salud también puede ser empleada al hablar de las deudas. Frente a las enfermedades graves, la primera medida que toman los médicos es promover la prevención como la manera ideal de propiciar el bienestar del organismo. En el caso de las finanzas personales, cuidar el dinero y tomar las medidas de cuidado para no ‘enfermarse’ de las deudas son recomendaciones vitales para gozar de salud financiera.

Entre más deudas se adquieran, más cuentas habrá por pagar, con los intereses, seguros y adicionales que ello implica; por ello, se sugiere ser consciente del cupo de endeudamiento y no superarlo.

Ahora bien, al momento de pagar las deudas también es importante hacerlo correctamente. Desde el blog de Mis Finanzas Personales en Control aconsejan no caer en el desespero, puesto que se pueden tomar decisiones aceleradas que afecten la tranquilidad. En lugar de emprender acciones drásticas, indican desde el portal, lo ideal es pensar con cabeza fría y encontrar las soluciones más adecuadas para cumplir con los debidos pagos.

Otra de las equivocaciones que cometen las personas al sanar sus deudas es hacer el mínimo esfuerzo. De acuerdo con la sección de educación financiera de BBVA, usualmente los deudores tienden a pagar la cuota mínima sugerida por la entidad financiera, en lugar de saldar la cuenta entera o por lo menos un porcentaje mayor según las posibilidades. A la larga, se suman los intereses de los créditos, al punto que puede resultar pagando más por este rubro que lo que se abona a capital.

Al listado de errores se agrega uno particular, que puede ser una alternativa para liberar las deudas o, por el contrario, resultar siendo más dañina para las finanzas personales. Según el portal Mi Bolsillo, solicitar un préstamo para saldar las deudas puede derivar en una bola de nieve.

Hay que ver las dos caras de la moneda: por un lado, existe un producto financiero llamado compra de cartera, el cual consiste en transferir el saldo de una deuda de un banco a otro, con ánimo de conseguir mejores condiciones para el pago de las obligaciones, como los intereses y los tiempos. En este sentido, la medida puede ser favorable, porque se obtiene una ventaja en el pago.

No obstante, lo anterior no es igual a solicitar un crédito para cubrir una obligación financiera, ya que esto aumenta el endeudamiento y puede convertirse en una carga para la economía.

Entre las equivocaciones que se cometen, se enlista gestionar las deudas de forma indebida. Como indican desde el portal Mis Finanzas en Control, es común que al querer acabar con las deudas se procure disminuir la más grande, pero cuando el bolsillo no da para tanto puede generar problemáticas. Por ello, se sugiere apostarle más bien a las más pequeñas e ir cubriendo las demás en las medidas de las posibilidades.

Ignorar las deudas, no contemplarlas dentro del presupuesto o no idear una estrategia para saldarlas, considerando los ingresos, los gastos y el ahorro, es otra de las fallas en las que se cae.