Los expertos aseguran que entre los tres a los cinco años de edad, es una de las etapas más importantes del ser humano para aprender habilidades nuevas y tener un crecimiento personal. Y, en la actualidad, enseñanzas como la inteligencia emocional o financiera, se han convertido en factores claves para el futuro de las nuevas generaciones, puesto que durante décadas, nunca fueron parte de la enseñanza en el hogar, los colegios o las universidades. Esto ha llevado a muchos a no entender cuando se les habla de tasas de interés, ingresos, egresos, impuestos, ahorros o fondos de emergencia, entre otros tantos conceptos.
Unicef resaltó que la educación social y financiera para la infancia (ESFI) es crucial para inspirar a los niños a ser ciudadanos social y económicamente responsables y empoderados. A esto, se le suma la opinión de diferentes expertos, que señalan que este tipo de enseñanzas hace que los niños maduren de una forma más independiente y sean menos vulnerables al momento de enfrentarse a situaciones como la declaración de renta, los créditos hipotecarios o simplemente el tomar un producto financiero.
Por su parte, Daniela Carvajalino, presidenta del Cartagena International School, explicó que su método de trabajo se basa en el premiado currículo de The Biz Nation, el cual ha permitido seguir planes de clase basados en aprendizaje experiencial y una innovadora metodología fundamentada en la neurociencia, la cual genera que, de forma divertida, se puedan aprender complejos conceptos financieros.
“Asimismo, tomamos en cuenta la teoría del cerebro triádico, en donde concebimos a cada niño como un ser constituido por múltiples capacidades interconectadas y complementarias. Bajo estas premisas, llevamos adelante estrategias de una educación más práctica, en la que ponemos desafíos lúdicos a los estudiantes que los ayuden a comprender situaciones financieras de la vida real”, afirmó la directiva.
Hace algunos años, una encuesta realizada por el Banco Mundial en Colombia, encontró que si bien el 94% de los colombianos había dicho que planificaba su presupuesto, solo el 23% sabía exactamente cuánto había gastado la semana anterior.
Asimismo, el 88% de los encuestados manifestó preocupación por tener que afrontar mayores gastos en el futuro, pero solo el 41% tenía en su momento planes de pagar por completo sus gastos de la vejez y, apenas uno de cada cinco podría afrontar algún imprevisto. No siendo poco, casi un 81% de la población no es capaz de calcular una tasa de interés simple.
Ahora bien, teniendo en cuenta este panorama, expertos en educación financiera del CIS, dieron a conocer cinco cosas que pueden llegar a hacer los padres en sus hogares para que los niños adquieran inteligencia financiera:
- Darles dinero semanalmente para que aprendan a administrarlo: Una forma, para que los niños entiendan los valores y los gastos que puedan llegar a generar en una semana, es darles un dinero limitado para que utilicen en su colegio, dándoles la claridad de que ese capital, es lo único que recibirán durante la semana. Es así como aprenderán por sí solos a distribuirlo en sus gastos diarios.
- Gastos necesarios e innecesarios: Es importante, por lo menos, una vez por semana y a través de diferentes prácticas lúdicas hacerles entender que en la vida hay gastos esenciales como la comida, los materiales del colegio, su ropa, y otros que simplemente son caprichos, como lo son los dulces o los juegos.
- Fomentarles el hábito del ahorro con victorias a corto y mediano plazo: Una de las cosas más importantes para el ser humano es el ahorrar, ya que esto, es un capital que permite cumplir con los propósitos que se hagan a futuro. Por lo tanto, es muy importante que el niño aprenda hacerlo solo, y para ello, inicié regalando una alcancía y luego, dialogué con él sobre cosas materiales que pudiera interesarle como una patineta o un videojuego. Luego, enséñele el camino de cómo lo puede llegar a conseguir en un determinado tiempo.
- Mostrarle mecanismos para ganar más dinero: Usualmente, en el CIS suelen llevarse adelante semanas del emprendimiento, en donde niños y jóvenes tienen la posibilidad de hacer y vender productos o alimentos a sus compañeros. Esto es una idea interesante que se puede inculcar desde el hogar, en donde los padres pueden mostrarles a sus hijos cómo llevar adelante pequeños negocios que les ayudará a generar ingresos.
- Impulsar la educación financiera a través de los juegos: Existen muchos juegos que promueven, de manera sencilla, la comprensión de conceptos financieros y ayudan a ganar ciertas habilidades y estrategias en temas de finanzas personales. Algunos juegos de mesa que puede llegar a tener en cuenta, es, en principio, el popularmente conocido Monopoly, luego hay otros como Cashflow, un juego diseñado por Robert Kiyosaki; De Empleado a Millonario o K’BBAN, que obligará a los participantes a aplicar conocimientos en matemáticas para volverse financieramente exitoso.