Uno de los dilemas de cada año para cualquier colombiano es el arriendo de un inmueble, mas cuando no se cuenta con un patrimonio propio, pero se está en el proceso de construcción de un ahorro que permita a futuro hacer realidad la compra de una vivienda o de un apartamento.
El arriendo se ha convertido en la mejor posibilidad para tener un lugar digno para vivir, sin embargo, encontrar un inmueble que se acomode a nuestras necesidades y presupuesto, genera todo tipo de complicaciones. Y dentro de ese proceso al que se enfrentan miles de colombianos cuando van a buscar ese espacio, es cuál opción les conviene: si un arriendo directo o por medio de una firma inmobiliaria.
Sobre esta inquietud, el portal Metro Cuadrado explica el concepto de ambos términos. En cuanto al arriendo directo, se refiere al servicio que ofrece directamente el propietario del inmueble y que promociona por medio de canales virtuales, clasificados en prensa escrita o redes sociales. Mientras que el arriendo por medio de inmobiliarias, es el que se genera cuando el propietario delega a una firma experta en el tema, la administración del inmueble y será esta la que lleve a cabo la relación comercial con el interesado en el alquiler del lugar.
Y ¿cuál es el mejor? Ambos son una buena opción, sin embargo, la elección dependerá de qué resulte más conveniente al potencial arrendatario. En ese sentido, Oikos Inmobiliaria brinda algunos argumentos en torno a esta inquietud, destacando que en lo relacionado al arriendo directo, el potencial inquilino puede tener un contacto directo con su arrendador, lo que supone una ventaja cuando sea negociar el precio del canon de arrendamiento y respuestas rápidas ante inconvenientes presentados en el inmueble.
Sin embargo, advierte que en muchos casos, hay un alto porcentaje de arrendatarios que no siempre cumplen con sus obligaciones al arrendar directamente. Si se decide por esta opción, se debe tener en cuenta que el contrato se firme con el verdadero dueño del inmueble y que este se comprometa a cumplir con todas las normas establecidas por la ley, entre estas, la de dirigirse a una notaría para autenticar este documento con el que se legalizan el arriendo de la vivienda o del apartamento.
“Cuando adquiere un inmueble en arriendo con el dueño también debe preguntar cuáles son los trámites a realizar, reunir los documentos y cumplir los requisitos para ser aceptado por el arrendador. Los más comunes son firmas de pagarés en blanco, letras de respaldo, e incluso depósitos por uno o dos cánones del valor del arrendamiento como garantía; tenga en cuenta que esto último es algo que no permite la ley”, indicó.
Con respecto al arriendo por inmobiliaria, esta brinda muchos más beneficios que la anterior. La más importante, la confianza, tanto para el propietario del inmueble, porque tendrá la seguridad que su bien será bien administrado; como para el arrendatario, que accederá a un lugar cuyo precio está regulado por el mercado y no está fijado de manera abrupta.
Así mismo, al encargarse las inmobiliarias del manejo del papeleo, esto implica el proceso tanto para arrendador como para el inquilino. Sumando a que estas empresas especializadas, cumplen al pie de la letra con las normas y, además, suelen tener en su inventario de propiedades administradas, una variada oferta, con la que pueden guiar al ciudadano interesado en arrendar, a elegir mejor -tanto en precio como en ubicación-.
“Adicionalmente, cabe mencionar que por lo general estas empresas cuentan con portales web que, entre muchas cosas, logran una mayor difusión y suelen atraer a los arrendatarios ideales al ofrecer información detallada y precisa”, puntualizó Oikos Inmobiliaria.