La calidad de la alimentación en los hogares colombianos durante el año 2022 ha sufrido una disminución preocupante, ya que los tipos de productos adquiridos para el consumo diario han afectado negativamente la dieta de al menos el 28 % de los hogares del país. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), estos datos revelan la dificultad de mantener una dieta balanceada en Colombia.

En el mismo sentido, la Escala de Experiencia de Inseguridad Alimentaria, presentada por el Dane y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), indica que en el 4,9 por ciento de los hogares colombianos al menos una persona ha pasado un día entero sin comer debido a la falta de recursos económicos.

Cifras del Dane muestran cuanto gasta en promedio un colombiano en comida. | Foto: Youtube transmisión

Estos resultados resaltan la estrecha relación entre la persistencia de la pobreza y la situación de hambre en el país. Según las cifras de pobreza monetaria registradas por el Dane, 19,6 millones de personas en Colombia tienen ingresos per cápita de 354.031 pesos o menos, mientras que 6,1 millones de personas tienen ingresos inferiores a los $161.099.

Considerando que el salario mínimo en Colombia es de 1.160.000 pesos, se puede observar que una gran parte de la población no gana lo suficiente como para mantener una dieta saludable.

Según las pautas de alimentación saludable del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), una dieta balanceada debe incluir cereales, raíces o tubérculos; frutas y verduras; leche y productos lácteos; carnes, huevos o leguminosas secas; grasas y azúcares, todo ello complementado con actividad física y suficiente ingesta de agua.

En este sentido, el ICBF señala que el costo promedio de una dieta saludable por persona al mes en el año 2023 asciende a 643.390 pesos.

Si analizamos los costos por grupo de edad, encontramos que para los niños y niñas de 2 a 5 años el costo mensual es de $375.094; para los de 6 a 9 años es de $464.997; y para los de 10 a 13 años alcanza los 630.295 pesos.

643.390 pesos cuesta en promedio la alimentación de un colombiano. | Foto: Libre de derechos

En cuanto a los adolescentes de 14 a 17 años, los hombres necesitan destinar $884.868 al mes para una alimentación saludable, mientras que las mujeres en ese mismo rango de edad deben gastar 666.094 pesos.

En el caso de los adultos varones de 18 a 59 años, el costo mensual es de $ 833.919, mientras que para las mujeres se mantiene en 666.094 pesos.

De igual manera, una alimentación sana para las personas mayores de 60 años representa un gasto de $ 625.759 al mes.

Estos datos ponen de manifiesto los desafíos que enfrentan los hogares colombianos para mantener una alimentación adecuada, especialmente aquellos que se encuentran en situaciones de pobreza, donde los recursos económicos limitados dificultan el acceso a una dieta equilibrada y saludable. Es fundamental que se implementen políticas y programas que aborden estas problemáticas y promuevan el acceso universal a una alimentación nutritiva en el país.

La inflación afectó considerablemente la alimentación de los colombianos. | Foto: Juan David Naranjo

La encuesta utilizó ocho preguntas para determinar la experiencia de inseguridad alimentaria de los encuestados. Los resultados revelaron que a medida que aumenta el número de personas en el hogar, la situación de hambre se agrava. En las familias con más de cinco integrantes, la prevalencia de inseguridad alimentaria alcanza el 39,7 %, mientras que en las zonas urbanas y rurales es de 39,5 % y 40,4 %, respectivamente.

Los departamentos más afectados son La Guajira y Sucre, donde las familias enfrentan mayores dificultades para proporcionar alimentos a sus integrantes. En La Guajira, la prevalencia de inseguridad alimentaria moderada es del 59,7% y del 17,5% en su forma grave. En Sucre, los números son del 47,9 % y 10,4%, respectivamente. Por otro lado, Caldas y San Andrés presentan menor prevalencia de hambre, con cifras de 14,6 % y 2,5 % en el caso de Caldas, y 17,2 % y 3,7 % en el caso de San Andrés.