El dólar es considerado como una de las monedas más fuertes en el mundo. Por esta razón, muchas personas optan por guardar sus ahorros en esta divisa. Así, esperan multiplicar sus recursos en caso de que se valorice o, al menos, que su dinero no pierda valor con el tiempo.

Para realizar este ejercicio, vale la pena hacer un seguimiento diario al comportamiento del dólar. De esta manera, es posible intentar anticiparse a las alzas o bajas que tenga la divisa, según las fluctuaciones que presente su cotización.

Desde hace varios días, el dólar se ha mantenido relativamente estable en comparación con el peso colombiano, oscilando entre valores cercanos a los 4.000 pesos.

Para este miércoles, 13 de septiembre, el dólar en casas de cambio se vende a 3.993 pesos colombianos. Con este dato, las personas interesadas podrán calcular cuántos dólares son capaces de comprar con el dinero que tienen disponible.

En ese orden de ideas, partiendo de la cotización actual, 50 dólares equivalen a 199.676 pesos colombianos.

El precio del dólar en Colombia se ha mantenido estable durante los días recientes. | Foto: El País

Con el objetivo de comprender un poco más sobre cómo funciona esta dinámica, vale la pena repetir la operación con un ajuste, tomando el precio del dólar hace unos meses, cuando alcanzó un valor superior a los 5.000 pesos.

Cuando el precio del dólar alcanzó su máximo histórico, 50 dólares costaban alrededor de 250.000 pesos. No obstante, esta cifra presentó un descenso considerable a medida que el peso se revaluó frente a la moneda norteamericana.

El dólar es considerado como una de las monedas más fuertes en el mundo. | Foto: SEMANA

Gobierno da pistas de cuánto podría ser el incremento para el salario mínimo en Colombia el próximo año

Restan pocos meses para terminar la vigencia actual y el Gobierno nacional prepara el terreno para la discusión sobre el alza del salario mínimo, un debate que cada año se da con diferentes gremios obreros y empresariales.

Este rubro, que fue unificado en 1983, establece un valor mínimo que las empresas deben pagar a sus trabajadores que sean contratados formalmente y con el cumplimiento de 47 horas a la semana, tiempo que se estableció tras la recién aprobada reducción de jornada laboral, la cual antes era de 48 horas.

Este sueldo debe ser ajustado cada año, con base en el comportamiento de la economía, la inflación y otros indicadores económicos como el precio del dólar, los cuales hacen variar sustancialmente el costo de vida y el poder adquisitivo de los colombianos.

El viceministro de Hacienda, Diego Guevara, se refirió al tema en una declaración a medios de comunicación. Aseguró que el incremento en 2024 podría ser de dos dígitos, lo que deja ver desde ya las aspiraciones que tiene el Gobierno para la negociación que iniciará formalmente en diciembre.

El gobierno anticipó que el aumento del salario mínimo para el otro año podría ser de dos dígitos, aunque aún resta un par de meses para el inicio de las negociaciones formales. | Foto: NO

Si se toma en cuenta que los dos dígitos comienzan desde el 10 %, el Gobierno podría hacer un aumento de algo así como $ 116.000 pesos, por lo que el nuevo salario mínimo podría quedar en $ 1.276.000, sin contemplar el subsidio de transporte.

Si dicho subsidio llegase a incrementar el mismo valor, quedaría en un valor de 154.000, por lo que el salario total que devengaría un trabajador sería de casi $ 1.500.000.

El viceministro también aseguró que nadie debería poner el aumento en tela de juicio, pues el ajuste se hace con base en la trayectoria que ha tenido la inflación durante el año.

“Nosotros en el Ministerio de Hacienda creamos este índice de la unidad básica de valor en el plan de desarrollo para que muchos de los montos dejen de estar indexados a salario mínimo y más bien únicamente a inflación”, comentó el funcionario durante el pronunciamiento.

Además, el viceministro agregó que este aumento también se hace pensando en que los trabajadores no pierdan su capacidad adquisitiva. “La ley colombiana define el piso de la negociación como inflación, más productividad, más un margen de negociación”, redondeó.