Tomar una ducha o sumergirse en la bañera marca una duda común para quienes tienen la posibilidad de acceder a ambas opciones. La inquietud radica, precisamente, en cuál de las dos supone un mayor consumo tanto de agua como de energía eléctrica.
Algunos piensan que la ducha permite una dinámica un poco más exprés, de manera que el agua que se utiliza no es demasiada. Por otra parte, llenar la bañera podría requerir algo más de volumen.
No obstante, todo depende de cada persona y los tiempos que destina para el momento del baño. Asimismo, en vista de que el agua fría no es la preferida para algunos, calentarla también demanda un gasto energético importante.
En primer lugar, frente al gasto de agua, una bañera estándar requiere cerca de 230 litros del líquido para llenarse. Si se compara con la ducha, el valor será relativo, pues depende de qué tanto dure la persona con la llave abierta.
En promedio, un ducha gasta entre 8 y 15 litros por minuto (la cantidad depende de su diseño). En ese orden de ideas, una baño de cinco minutos continuos, sin cerrar la llave mientras se enjabona, demandaría alrededor de 40 litros ―o 75 en los modelos menos económicos―.
Sin embargo, no todas las personas tienden a durar lo mismo bajo la ducha. En los casos extremos, por ejemplo, con un baño de 20 minutos, el gasto de agua podría llegar a los 300 litros, superando el volumen con el que se llenaría la bañera estándar.
Ahora bien, calentar el agua configura otro gasto importante. Algunos hogares cuentan con calentadores de gas, mientras que otros acuden a la energía eléctrica. En ambos casos, la cantidad de agua utilizada y la duración del baño suponen un mayor o menor consumo.
En resumen, los hábitos de cada persona inciden directamente en la cantidad de agua que utiliza al momento de ducharse. Mientras que algunos son más ‘relajados’ en ese sentido y se bañan dejando un día de por medio, otros incluso llegan a tomar hasta dos baños por día.
Por supuesto, la cantidad de agua que se gasta durante las duchas repercute en la factura de este servicio.
¿Cuánto tiempo debe durar una ducha diaria? Esto dicen los expertos
Comenzar el día con una buena ducha es ideal para despejarse e iniciar con energía el desarrollo de las diversas actividades. Sin embargo, muchas veces surge la duda de cuánto tiempo deben duran las personas bajo el agua y qué es lo recomendable.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que una ducha debe limitarse a cinco minutos para un uso sostenible de agua y energía que no supere los 95 litros de consumo medio diario. No obstante, hay personas que tardan mucho más de este tiempo y como si fuera poco a veces toman dos baños diarios.
Una vez al día es la frecuencia más adecuada para tomar una ducha. Adicionalmente, dermatólogos indican que no es recomendable alargar el tiempo bajo el agua ya que esto no beneficia en nada a la piel sino que, por el contrario, la seca. Esta es una razón de peso para no exceder los 5 o 10 minutos diarios bajo el agua.
En un artículo publicado en el diario El País, la dermatóloga Olivia López-Barrantes coincide en que la duración de la ducha en ningún caso debe llegar a los diez minutos. En su concepto, prolongar el tiempo que se pasa bajo el agua deshidrata la piel porque se produce una pérdida de agua transepidérmica.
Por esta razón, para la especialista, salvo que una persona se meta en la ducha después de haber realizado una excursión por un barrizal o una sesión intensa de gimnasio, cinco minutos deberían ser suficientes para que cualquiera se asee.
De igual forma, hay personas que, por temor al mal olor o a las bacterias, se duchan con mucha frecuencia y friccionan demasiado la piel, pero un artículo publicado en el portal CuídatePlus insiste en que esto tiene consecuencias para la piel y más si el baño no se realiza de forma suave y con un jabón indicado, el cual es aconsejable que sea neutro y sin perfume.