Una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos en Colombia es poder ajustar el presupuesto al bolsillo, procurando que el dinero alcance para cumplir con todas las obligaciones pendientes, al tiempo que se destina cierto porcentaje para realizar inversiones en línea con los objetivos personales y financieros.

Por ello, durante años, las personas trabajan para construir un patrimonio, comprar su propia casa o tener un carro nuevo; no obstante, a veces el ahorro es insuficiente, por lo que se debe recurrir a los créditos y los servicios que ofrece el sistema bancario. Ante esto, la pregunta que se realizan las personas es si merece la pena arriesgarse a tener tal deuda.

Lo anterior debido a la presión que suelen generar estos pagos sobre el presupuesto a la larga, si se suman las cuotas, los intereses y los seguros de este tipo de productos financieros. De acuerdo con la entidad Resuelve Tu Deuda, hay algunos gastos que suelen generan sobreendeudamiento, lo que pone en riesgo la economía personal y de la familia, especialmente cuando no se estudian con precaución.

Una de ellas, indican, es realizar planes de vacaciones contando con un dinero prestado. En su lugar, es preferible construir un ahorro que permita costear un paseo y disfrutar del espacio de ocio con tranquilidad. Es más, el principal riesgo de los créditos consiste en que los usuarios tienden a creer que cuentan con esos recursos sin limitación alguna, sin tener presente que esa plata se deberá reponer más adelante.

Según indica la entidad solucionadora de deudas, “se está adquiriendo una obligación de consumo que se caracteriza porque va perdiendo valor con el paso del tiempo pero que se tendrá que pagar en varios plazos”; a la larga, dependiendo de las condiciones del préstamo, se puede terminar pagando más de lo que se invirtió en las vacaciones.

Antes de endeudarse de esa forma, se recomienda establecer más bien un plan a mediano plazo, detallar las acciones para llegar ahí y ser estratégico en el uso del dinero para financiar los viajes del bolsillo propio.

De hecho, elaborar un presupuesto puede ser la guía principal para saber qué tanto merece la pena adquirir una nueva deuda. Como lo explican desde el portal Saber Más Ser Más, de Asobancaria, una medida importante al momento de organizar las finanzas es la capacidad de endeudamiento, la cual se define a partir de los ingresos y los gastos que se deben costear, entre ellos las obligaciones pendientes.

En este sentido, indican, el límite lo establecen los ingresos, puesto que las deudas y pagos que se deben hacer durante el mes no pueden ser mayores al dinero que entrega, ya que ello sería inviable para la persona.

Siguiendo esta línea, invertir en un carro nuevo puede ser una de las compras riesgosas, sobre todo cuando las cuotas del crédito de vehículo supera la capacidad de pago de los compradores. Lo mismo sucede con quienes aspiran a tener una vivienda propia por este mecanismo. De acuerdo con Resuelve tu Deuda, estas inversiones son favorables cuando no representan una desmejora en la calidad de vida de las familias a causa del endeudamiento.

Pese a que estos objetivos personales generan gran satisfacción, obtenerlos a partir de mecanismos que presionan la economía puede, en realidad, convertirse en una cruz difícil de cargar para los ingresos, lo que puede conllevar a consecuencias negativas en el futuro si no se gestionan adecuadamente.

En todo caso, los expertos insisten en el ahorro como la alternativa más idónea para construir y alcanzar los logros profesionales, realizando cambios en los patrones de consumo, como lo son los gastos hormiga.