En Colombia los conductores de carros particulares, motos, vehículos de transporte público y carga tienen la obligación de adquirir la Póliza de Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (Soat), un seguro que cubre gastos médicos y daños en casos de accidentes, como también daños ocasionados que tengan las personas transportadas en el vehículo o moto o la afectación de algún imprevisto vial.
Actualmente, si un conductor es sorprendido conduciendo alguno de los vehículos sin el Soat debe pagar la multa que está en alrededor de un millón de pesos, que como dice la norma son 30 salarios mínimos diarios legales vigentes.
Sin embargo, en Bogotá hay un número importante de motocicletas que están en contra de del aumento del precio del seguro y el incremento del precio de la gasolina. Es de recordar que el Gobierno, luego de haber revelado la cifras del déficit ocasionado por el Fondo de Estabilización de Precio a los Combustibles, dedicó en subir 200 pesos por galón de la gasolina corriente.
Ante las inconformidades manifestadas por el gremio de moteros en la capital, el Ministerio de Transporte realizó mesa de trabajo con los motociclistas y por más de tres horas el funcionario escuchó las peticiones de conductores; aseguró que a través del diálogo llegarán a acuerdos que permitan viabilizar sus inquietudes.
“Para nuestro gobierno ustedes son muy importantes, es que no estamos hablando de que aquí hay 100.000 motos en Colombia o hay 500.000 motos, aquí hablamos de que hay más diez millones de motos y la moto es hoy una fuente de trabajo fundamental que no podemos ignorar. Muchos de los motociclistas trabajan con plataformas, estamos trabajando con la ministra de Trabajo para determinar cómo en esa relación que hay, de los que trabajan en plataformas, hay un contrato realidad y obligamos a que les cubran la seguridad social, ese es un tema vital para nosotros, que todos los que van en una moto tengan seguridad social, pero en especial que tengan garantía de seguro a la vida”, expresó el ministro de Transporte, Guillermo Francisco Reyes González, en la apertura del espacio.
Precisamente, los motociclistas se pronunciaron frente a preocupaciones como las condiciones de seguridad, el estado de la malla vial, el Soat y los altos índices de siniestralidad.
“Es importante que de aquí podamos salir con unos compromisos concretos para diez millones de colombianos honestos, trabajadores, que hacen país, y que a diferencia del resto de colombianos, escogieron la moto como un medio de transporte, esa es la única diferencia, que aparte genera muchos subrecursos y es un vehículo que se ha constituido en nuestro país como un vehículo de economía social”, explicó Daniel Villaveces, director de Movilidad FIM Latinoamérica.
En el caso del Soat, los motociclistas exigieron planes de financiamiento para que los moteros puedan pagarlo, aseguraron que muchos de ellos ganan el mínimo.
“El presidente Gustavo Petro ha ordenado que no hay autorización de incrementar las tarifas del Soat, hasta que haya una revisión integral de montos, capacidades y el proceso de expedición mismo, Nosotros vamos a revisar con autoridades y agentes de tránsito cómo se puede manejar el tema mientras se resuelve el Soat, en aquellos eventos en que no ha sido responsabilidad del motociclista no tenerlo, cuando es responsabilidad de las aseguradoras“, agregó Reyes.
En cuanto a las denuncias de motociclistas sobre el exceso de la fuerza pública en procedimientos de inmovilización de las motos, el Gobierno se comprometió a realizar un revisión de los estatutos del Código Nacional de Tránsito con el fin de que la institución realice actividades pedagógicas y no de imponer sanciones o quitarle un medio del trabajo al motociclista.
El próximo 25 de octubre habrá una nueva reunión que fue pactada por el Gobierno nacional y el gremio de motocicletas, en qué esperar de los acuerdos que firmaron entre ambas partes.