Durante los últimos años en Colombia se llevó adelante un impulso al desarrollo y venta de Viviendas de Interés Social (VIS), puesto que las mismas han representado una solución para la media de los colombianos de tener su propio hogar. Factores como el precio, la ubicación y los lugares en los que se puede llegar a encontrar este tipo de construcciones han promovido que sus índices sean superiores a los de otros indicadores.

56 % de las personas que adquieren domicilios acceden a proyectos ‘VIS’ | Foto: Cortesía: Alcaldía de Medellín.

Según cifras de Camacol, durante 2021 se vendieron 183.641 viviendas VIS, mientras que en 2022 fueron 168.224. A esto, se le suma el indicador del tercer trimestre de 2022 del Dane, que señala que se dio inicio a 51.434 unidades de vivienda, de las cuales 31.936 se destinaron a VIS y 19.498 a no VIS.

Y aunque este tipo de construcciones representa una gran ventaja para muchos en el país, el mayor dolor de cabeza para los compradores de este tipo de viviendas es que la mayoría son entregadas en obra gris.

Las plataformas digitales dedicadas a la compra y venta de vivienda se vienen convirtiendo una excelente alternativa para acceder a un inmueble en el país | Foto: Getty Images / skynesher

Para Santiago Zúñiga, CEO de Vivvidero, una startup de proyectos de vivienda, indicó que: “Lo más interesante de la obra gris es que puede ser interpretada como un lienzo en blanco en el que se puede llevar adelante cualquier obra de arte. En ese sentido, para empezar y que esto no sea un dolor de cabeza para la mayoría, lo que debe tener en cuenta en principio es la fecha de entrega del inmueble y cuáles son los acabados o materiales con que lo entrega la constructora, esto es fundamental porque será la base con la que se parte para saber lo que se necesita y empezar a armar su presupuesto”.

De esta manera, el equipo de expertos de la startup dio a conocer una guía con cuatro recomendaciones que son esenciales para pasar de un departamento de obra gris a un anhelado hogar terminado en su totalidad:

  • Tiempo Vs. Realidad: Todos esperan tener la vivienda de ensueños lo antes posible, sin embargo, hay que tener en cuenta que este tipo de proyectos tardan un tiempo. Esto, también dependerá de lo que se acuerde con el contratista al que decida encargarle la obra.
  • Qué uso le dará a la vivienda: Es importante determinar cuál va a ser el uso que le quiere dar a la vivienda. Si se desea para arrendar, se puede disminuir su presupuesto buscando acabados que sean de una gama más baja. Pero si al contrario se busca vivir en esa propiedad, lo más recomendable es conseguir elementos premium de acuerdo al presupuesto, ya que estas se van a ajustar a los gustos personales, pero también van a soportar mejor el paso del tiempo.
Tasas preferenciales, financiación hasta del 90 por ciento del inmueble y plazos a 30 años: la fórmula del Fondo Nacional del Ahorro para motivar a los jóvenes a tener vivienda propia | Foto: Amarilo
  • Busque mucho y guarde en Pinterest: Esta red social se convirtió en la predilecta para encontrar la inspiración a lo que uno quiera. En ese sentido, se puede buscar varios estilos de interiorismo que se ajusten a los gustos, pueden ser más minimalistas, modernos, rústicos, escandinavos, mediterráneos, eclécticos, entre un sinfín de alternativas que hay en el mercado y, que serán útiles para guiar al arquitecto de cómo desea el hogar.
  • Calcular el presupuesto, cotizar y evaluar cada punto: Es importante que a la hora de cotizar con diferentes contratistas, no solo se debe tener en cuenta el precio, sino también la trayectoria del mismo, la fiabilidad y, los tiempos que le garantiza. Además, es importante que sea claro en el costo de todos los productos que se van a instalar: pisos, regaderas, paredes, luces, etc.
  • Analizar y revisar las alternativas de pago: En el mercado, hay una variedad de alternativas de pago que se pueden llegar a tener en cuenta para llevar adelante la adecuación de la vivienda en obra gris. Las posibilidades pueden ser créditos de mejoramiento de vivienda o créditos de libre inversión, en donde, se recomienda tener más en cuenta el primero, ya que tiene mejores tasas de interés, y por último, se puede pagar con las cesantías de las cajas de compensación de empleados.

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