El famoso corrientazo ha sufrido un aumento del precio por cuenta del elevado costo de vida en Colombia. Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, la cifra anual de inflación en diciembre del año pasado quedó en 13,12 %, una cifra que no se registraba en el país durante las dos últimas décadas.
Es de recordar que el Dane explicó que, en gran medida, lo que jalonó que la inflación quedara en este indicador fueron los alimentos. “El grueso de la variación anual por las divisiones de gastos está explicada por lo que sucede en alimentos y bebidas no alcohólicas; fue la tendencia que observamos a lo largo del año”, indicó Piedad Urdinola, directora de la entidad.
Los alimentos continuaron presionando los presupuestos familiares, en especial de los ciudadanos que se ubican en los niveles pobre y vulnerable de la pirámide socioeconómica. Así como lo explicó la directora, el aumento del costo de vida fue jalonado principalmente por las divisiones alimentos y bebidas no alcohólicas, como también de alojamiento, agua, electricidad y gas. Las variaciones, según las divisiones alimentos y bebidas no alcohólicas, quedaron en 27,81 %, y restaurantes y hoteles en 18,54 %.
Esta situación ha obligado a los restaurantes a aumentar sus precios de los almuerzos que ofrecen, para equilibrar, de alguna manera, el gasto y las ganancias del negocio. Sin embargo, los más afectados son los ciudadanos que, de hecho, preferían comer el ‘corrientazo’ porque esta era la opción más económica.
Por ejemplo, en las principales ciudades del país, como Cali, Bogotá y Medellín, el ‘corrientazo’ quedó entre 13.000 pesos a 16.000 pesos, cuando por este valor se conseguía el famoso ‘ejecutivo’ tiempo atrás. De hecho, la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica – Acodrés, indicó que el valor del almuerzo subió en 20 % en comparación con el periodo anterior.
Volviendo a la información compartida por el Dane para revisar más a fondo la situación, en el más reciente informe ‘Índice de Precios al Consumidor (IPC)’, los alimentos que más subieron de precio en la canasta básica familiar fueron: tubérculos (109 %), cebolla (106 %), yuca (88 %), arroz (54 %), leche (36 %) carne de res (20 %).
En diciembre de 2022, los mayores incrementos de precio se registraron en las subclases de comidas preparadas fuera del hogar para consumo inmediato en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio (21,40 %), bebidas calientes (20,81 %) y comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio (18,70 %).
Los menores incrementos de precio se reportaron en las subclases pago por alimentación en comedores (6,90 %), gastos en discotecas (7,67 %) y servicios de alojamiento en hoteles (12,97 %).
Y según el reporte de este 18 de enero de 2023 por parte de central mayorista de abastos de Bogotá, el movimiento comercial desarrollado mostró 14 bajas y 8 alzas en los precios de algunos productos de la canasta familiar, como: alcachofa, apio, brócoli, cebolla cabezona blanca, cilantro, espinaca, y lechuga presentaron recuperación en la oferta y tendencia a la baja en sus cotizaciones.
Y la cebolla larga, haba verde, habichuela, zanahoria, mandarina, papa criolla y plátano hartón subieron sus cotizaciones.
Hubo un descenso en la oferta de arveja verde como consecuencia de los problemas de la vía panamericana. Según el comercio no hay desabastecimiento de productos proveniente de Nariño, gracias a las vías alternas que están tomando los trasportadores del sur del país.
La papa parda pastusa continúa con precio alto por bajos niveles de oferta, precio $140.000 el bulto de 50 kilos, la papa sabanera presento recuperación en la oferta paso el bulto de $200.000 a $180.000.