El mercado de vehículos usados en Colombia se ha convertido en una opción cada vez más atractiva para aquellos que buscan adquirir un automóvil propio a un precio más accesible que uno nuevo. Según datos de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), la compra de carros nuevos ha disminuido un 22,2% en lo que va del año, mientras que los traspasos de vehículos usados han alcanzado alrededor de 127.586 registros hasta febrero.
Bogotá encabeza la lista de traspasos, con 27.661 registros; seguida de Cali, con 6.025; Envigado, con 5.473; y Medellín, con 4.835. Esta tendencia refleja el interés creciente de los colombianos por adquirir un vehículo propio a través del mercado de usados.
En este sentido, las subastas de vehículos usados se han convertido en una opción popular para aquellos que buscan obtener un automóvil a un precio asequible.
Martha Gómez, gerente general de la plataforma Subastas y Comercio, destaca la importancia de realizar una investigación exhaustiva y tomar precauciones antes de participar en una subasta para garantizar la calidad del vehículo y obtener el mejor valor por el dinero invertido. La procedencia lícita de los vehículos subastados provenientes de reconocidas empresas del país brinda seguridad a los compradores en cuanto a las condiciones del negocio y el estado de los vehículos.
“Muchas personas encuentran en las subastas una alternativa viable para satisfacer sus necesidades de transporte. Como comprador, es importante realizar una investigación exhaustiva y tomar precauciones antes de realizar una compra para asegurarse de obtener un vehículo en buen estado y obtener el mejor valor por su dinero”, asegura Gómez.
¿Por qué comprar un vehículo usado?
Comprar un carro usado puede ser una opción más conveniente que adquirir uno nuevo, según Gómez, por varias razones:
- Menor costo: según el informe de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), la adquisición de carros nuevos ha retrocedido en el país, lo que ha provocado una disminución en los precios de los carros usados. Esto los hace más accesibles para aquellos con un presupuesto limitado.
- Depreciación reducida: los carros nuevos sufren una depreciación significativa en sus primeros años de propiedad. Según datos del sitio web de finanzas personales MoneyCrashers, un vehículo nuevo puede perder hasta el 20 % de su valor en el primer año y hasta el 60% en los primeros cinco años. Al comprar un carro usado, la depreciación ya ha ocurrido, lo que significa que su valor se mantiene de manera más estable.
- Historial de rendimiento: al comprar un carro usado, es más fácil acceder a información sobre su historial de rendimiento y confiabilidad. Los propietarios anteriores o los informes de mantenimiento pueden proporcionar detalles sobre cualquier problema o reparación que haya experimentado el vehículo. Esto permite tomar una decisión más informada sobre su estado general y evitar sorpresas desagradables.
- Mayor variedad de opciones: el mercado de carros usados ofrece una amplia variedad de modelos, marcas y estilos para elegir. Esto brinda la oportunidad de encontrar el vehículo que se ajuste mejor a las necesidades y preferencias individuales. Además, la compra de un carro usado puede permitir acceder a modelos más antiguos o de lujo a un precio más asequible.
- Menor coste de seguro: en general, el seguro de un carro usado tiende a ser más económico que el de un vehículo nuevo. Esto se debe a que los costos de reparación y reemplazo suelen ser más bajos en los carros usados. Sin embargo, es importante solicitar cotizaciones de seguros específicas para el vehículo que se está considerando comprar.
Recomendaciones a la hora de comprar un carro usado
A la hora de adquirir un vehículo usado es fundamental tener en cuenta dos aspectos clave para realizar una compra inteligente:
- Establecer un presupuesto realista: antes de iniciar la búsqueda, es importante determinar el monto máximo que se está dispuesto a invertir en un carro usado. Esto incluye no solo el precio de compra, sino también los costos de mantenimiento, seguro y posibles reparaciones futuras.
- Negociar el precio: no hay que temer a negociar el precio del vehículo. Antes de hacer una oferta, se debe realizar una investigación sobre el valor de mercado del modelo y año del carro de interés. Esta información servirá para fundamentar una oferta y buscar un acuerdo justo para ambas partes.