Tener una buena imagen financiera deber ser una de las prioridades de casi todos hoy en día, ya que se usen o no, esto permite acceder a mejores productos y servicios por parte de los bancos y dan tranquilidad a la hora de enfrentarse a situaciones como iniciar un negocio, buscar un socio inversionista o simplemente evitar a los molestos cobradores.
Acceder al sistema financiero es fundamental para el desarrollo de los proyectos de vida de los colombianos, por ello es preciso tener en cuenta los factores que inciden en la obtención de ciertos productos y servicios. Tal es el caso del puntaje crediticio.
Las centrales de riesgo generan reportes que son solicitados por las entidades financieras del país para -a partir de ellos- tomar decisiones sobre si niegan o aprueban una solicitud de crédito, préstamo o brindar algunos servicios financieros. Por ello, estar en la “lista negra” de estas organizaciones no es la mejor noticia que una persona puede tener cuando queda registrado en ellas.
De acuerdo con el apartado de Consejos para consumidores de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, el puntaje crediticio es un número que denota una calificación de la probabilidad de un individuo para responder a tiempo y en la cantidad acordada al pago de un préstamo.
Para calcular esta cifra, los prestadores se basan en la información financiera del usuario, como los créditos que ha tenido, el historial de pagos, el monto de sus deudas, el tiempo por el que ha conservado un préstamo en particular, entre otros.
Ahora bien, tener un buen puntaje incide en que, por ejemplo, los bancos presten más dinero u ofrezcan servicios VIP que generalmente no se presentan a clientes regulares. Caso contrario de quienes no cuentan con una buena imagen, a quienes generalmente se les prestan bajos montos o se les niegan sus solicitudes.
Según expertos de Sistecrédito, actualmente existen algunas importantes recomendaciones que se deben seguir para mantener una “hoja de vida” financiera con buena reputación, para que cuando necesite un crédito, comprar una casa, un carro o desee estudiar, no se detengan sus sueños por no tener acceso a un capital por medio del sistema financiero.
Lo primero es armar un presupuesto, en el que se establezcan claramente los ingresos mensuales o el promedio de los mismos, así como los gastos extra que se pagan cada mes como el impuesto predial, soat, cuotas extraordinarias y demás. De esta forma se estructurarán los gastos y se evitarán cuentas demasiado altas, imposibles de pagar.
“En segundo lugar, no malgaste el dinero extra: por ejemplo, cuando reciba la prima o realice un trabajo extra, inviértalo en el pago de deudas, con eso estará sumando un buen puntaje a su vida crediticia y le será más fácil volver a recibir préstamos cuando los necesite”, agregó esta empresa en su guía.
El tercer consejo de Sistecrédito es nunca comprar bajo emociones y explican que hay una gran cantidad de personas que compran productos más por emoción que por la misma necesidad. Algo que no está del todo mal, aunque hay quienes no controlan la adquisición compulsiva de artículos, situación que los lleva a sobre-endeudarse.
“Otra sugerencia es refinanciar las deudas. Si bien no es lo mejor llegar a este punto, es una alternativa para solucionar el no pago de las mismas y evitar un reporte a la central de riesgo, de ya haber sido reportado, se puede lograr salir del mismo por medio de la solicitud de la refinanciación de la deuda directamente con la entidad prestante”, indicaron.
Por último, estos expertos recomiendan que si la mora es inferior a tres meses (90 días), las personas afectadas busquen alternativas como una extensión del plazo de pago, la cual, en caso de ser denegada, tiene la opción de presentarse a las oficinas de la Superintendencia a cargo o al Defensor del Consumidor Financiero e interponer una queja o solicitar un acuerdo conciliatorio con la entidad.
“Para cerrar, es importante que siempre utilice sistemas de préstamo legales, nunca utilizar los denominados ‘gota a gota’, ya que son procesos complejos que manejan modalidades con costos ocultos o procesos irregulares, que derivan -en muchos casos- con actividades delincuenciales, además que después querrá poder pagarles accediendo a créditos con el sistema financiero, pero ya con deudas muy altas”, concluyeron las recomendaciones.