Es común que las personas busquen cada vez más adquirir algo gracias a la moneda de cambio de cada país, pero cuando el precio de un bien o servicio sobrepasa los ingresos de un sujeto, sus finanzas empiezan a verse comprometidas.
A este tipo de casos, en los cuales las personas no pueden generar la misma cantidad de ingresos de lo que compran, se le conoce como sobreendeudamiento, ya que no se cumple con el pago de las deudas contraídas.
De acuerdo con el Ministerio de Economía argentino, no tener suficientes ingresos se puede dar por motivos como: primero, y las menos recomendadas, deudas innecesarias que superan los montos adquiridos en un pago salarial; segundo, situaciones imprevistas por pérdida de trabajo, accidentes y otras adversidades.
Es así como los conocedores del tema dicen que “es prudente que el endeudamiento no supere el 40 % de nuestros ingresos mensuales”.
No obstante, hay quienes no tienen el poder de abstención o dejan a un lado las finanzas a la hora de adquirir un crédito, el cual funciona como un mecanismo para alcanzar una meta que suele ser material.
Saber más ser más consigna que muchos de los casos de sobreendeudamiento es porque no hay una diferencia entre si el nuevo crédito es para una necesidad o un deseo. Al haber esta falencia, no hay una jerarquización que permita tomar la decisión más sensata.
Todos tienen necesidades, pero el economista Max Neef dice que es bueno centrarse en el desarrollo de estas a nivel humano, más no en los objetos. En ese sentido, hay que tener en cuenta que existen necesidades básicas, las cuales hay que suplir, como otras que solo satisfacen un factor momentáneo. Estas últimas generan más necesidades y es cuando hay una carencia, en este caso falta de dinero.
En vista de todo lo anterior, al ser algo que puede repercutir en el estilo de vida, es cuando las personas se preguntan cómo evitar el sobreendeudamiento.
Para bajar la deuda, lo primero que hay que hacer es identificarla. El portal Kondinero detalla que también es necesario reconocer que existe un problema y comenzar con acciones concretas, dejando de posponer lo que es una realidad de declive financiero.
Luego de esto, Profeco y Consusef dicen que hay que seguir los siguientes pasos que están relacionados para obtener una economía sana:
- Elaborar un presupuesto.
- Priorizar los gastos.
- Consumir inteligentemente.
- Comparar precio y calidad.
- Conocer la capacidad de endeudamiento.
- No retrasarse en los pagos.
- Tener un plan de vida financiero.
- Decidir ahorrar.
- Preparar el retiro de dinero y dividirlo conscientemente.
Al ser el primer paso, el presupuesto es el que desencadena las otras estrategias. Los expertos indican que este debe ser lo más detallado posible y jerarquizar la adquisición de bienes y servicios. En adición, recomiendan ser un consumidor inteligente que evita comprar de manera compulsiva.
Por otro lado, evitar el sobreendeudamiento también es no cometer errores financieros comunes que Kondinero comparte. Los que más se presentan son:
- Pagar el mínimo en la tarjeta de crédito.
- Manejar muchas tarjetas de crédito.
- No hacer frente a las deudas.
- No conocer el historial crediticio.
- No estar asegurado.
- No tener claro qué es lo que necesita.
- Invertir en instituciones no autorizadas.
- Firmar sin leer los contratos.
En resumen, el sobreendeudamiento se da por la falta de atención y consciencia de un comprador al adquirir un bien y servicio que sobrepasa la capacidad de endeudamiento. Hay sujetos quienes ven la tarjeta de crédito como un ingreso extra, cuando en realidad no lo es porque hay que pagar después.
Asimismo, los especialistas en finanzas dicen que las personas deben conocer “las reglas del juego” antes de adquirir una deuda, por más mínima que sea, puesto que cada entidad u organización maneja sus propias normativas crediticias.