La segunda semana de marzo de este 2023 tuvo noticias importantes en materia financiera. Ocho bancos, hasta el momento, decidieron reducir las tasas de interés a sus clientes, como medida para aliviar el golpe rotundo que han sufrido los bolsillos de los colombianos por cuenta de la adquisición de bienes y servicios.
Los clientes de estas entidades, que han manifestado que en este momento de coyuntura, cuando el costo de vida está por los cielos, adquirir los bienes de primera necesidad y alimentos se volvió un dolor de cabeza, a lo que indican que no tienen otra salida sino endeudarse para cubrir los gastos. Ante esta necesidad ahora los créditos saldrán más baratos.
Los bancos que han decidido tomar la decisión fueron, el primero en la lista, Bancolombia, luego le siguió 24 horas después Davivienda, Banco de Occidente, Banco de Bogotá, BBVA, Scotiabank Colpatria, Banco Pichincha y Findeter.
Por su parte, Jonathan Malagón presidente actual de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria), el gremio del sector financiero colombiano, le confirmó a SEMANA que la decisión de las entidades financieras abre camino a seguir impulsando la economía popular, como una de las políticas claves del Gobierno del presidente Gustavo Petro.
“En un entorno económicamente retador como el que estamos viviendo, las entidades financieras muestran un enorme compromiso con el país, especialmente con los más vulnerables, a través de dos medidas. Primero, la reducción de intereses a las tarjetas y a algunas otras tipologías de crédito, fundamentalmente focalizado en quienes tienen menos ingresos. En segundo lugar, la suscripción a los objetivos del gobierno nacional en términos de financiamiento a la economía popular”, indicó Malagón a este medio.
Ahora bien, algunos de los presidentes de los bancos, como es el caso del presidente del BBVA, Mario Pardo, e incluso el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, han dicho que la inflación en Colombia llegó a su pico, lo que podría dar a entender que bajaría en los próximos meses, lo cual tendría un efecto directo en las tasas de interés.
A lo que el presidente Asobancaria, Jonathan Malagón le confirmó a SEMANA que la inflación está cerca de tocar techo.
“Ciertamente, el ministro Ocampo tiene la razón. Existe consenso entre los analistas en que la inflación se encuentra acercándose a su techo, por lo que a partir del segundo trimestre podremos ver reducciones en los niveles de precios. Lo anterior llevará a que desde el segundo semestre del año pueda verse un cambio en la postura de política monetaria, lo que a la postre conducirá a reducciones adicionales en las tasas de interés”, indicó el presidente gremial.
Es de recordar que en meses pasado, la política monetaria aplicada por el Banco de la República, para tratar de contener la escalada de la inflación, ha llevado a incrementar las tasas de interés de referencia, las que finalmente llegan a la banca comercial con aumentos exponenciales. De hecho, la tasa de usura, que es el máximo valor que le pueden cobrar a un usuario de un crédito, está en 46,26 %, y algunas entidades financieras estaban cobrando al tope máximo que es fijado por la Superintendencia Financiera.
En realidad, lo que se busca cuando el Banco de la República aprieta con las tasas de interés es el enfriamiento de la economía, es decir, que la gente baje un poco el consumo, principalmente con créditos, para que los precios no se suban tanto, pues, de acuerdo con la ley de oferta y demanda, si el consumidor está comprando mucho, pero el productor no está poniendo la suficiente cantidad de productos en el mercado (justamente para protegerse de la inflación), se terminan aumentando los precios.