Un crédito es un tipo de préstamo que una entidad financiera otorga a un ciudadano con el compromiso de que el monto entregado sea devuelto en su totalidad, según los tiempos o plazos establecidos con base en el contrato firmado entre el banco y dicho cliente.
Esta es una opción de financiación a la que están acudiendo muchos colombianos para atender alguna necesidad económica en el corto y mediano plazo. Sin embargo, para tomar una buena decisión respecto a la adquisición de este tipo de obligaciones, se deben tener en cuenta varios factores como la situación financiera de la persona que va a solicitar el crédito; el plazo, mensualidades y tasa de interés; capacidad de pago, condiciones establecidas por el banco para el otorgamiento de dicho préstamo; y el historial crediticio.
“Construir un buen historial crediticio no solo implica tener acceso a más servicios financieros, sino también a mejores tasas de interés y condiciones de crédito en general. Mantener un récord positivo en este aspecto es un tema de compromiso y responsabilidad a largo plazo, que se convierte en un factor decisivo para decidir si es el mejor momento para obtener un crédito”, destaca el BBVA.
Sin embargo, cuando se ha tomado la decisión de solicitar un crédito a un banco y se quiere tener altas posibilidades de que este sea aprobado, la fintech Enbanca da a conocer algunos tips para que se pueda llevar a cabo de manera exitosa este trámite ante cualquier entidad financiera.
En primer lugar, recomienda que el ciudadano conozca su capacidad de endeudamiento y capacidad de pago, antes de solicitar un crédito. “Así se tendrá un balance sobre ingresos: gastos actuales, deudas vigentes y gastos fijos, teniendo en cuenta los intereses a pagar, para evitar caer en incumplimientos por morosidad”, indica.
Así mismo, señala que lo ideal es destinar hasta 40 % de los ingresos al pago de deudas, puesto que la clave es tener control sobre sus ingresos y gastos.
Otro aspecto importante y que aconseja la entidad es tener una buena educación financiera, debido a que se convierte en una herramienta necesaria para tomar decisiones informadas. “Esto incluye aprender a presupuestar, ahorrar, invertir y administrar de manera efectiva sus finanzas personales”, resalta.
“Si bien el acceso a financiamiento formal tiene efectos positivos para los hogares y las empresas colombianas, esto no ocurre de manera automática. Usualmente, existen barreras tanto de oferta como de demanda, y uno de los grandes problemas en el país es el desconocimiento en términos de educación financiera, lo que cierra las puertas a tener una planificación del gasto, herramientas de financiamiento y criterios de selección de las mismas”, puntualizó Tatiana García, directora de mercadeo de Enbanca.
A tener en cuenta
El programa de educación financiera “Saber más, Ser más” de Asobancaria, recomienda que antes de decidirse por un crédito, se revise el panorama económico general. Es decir, cancelar otras deudas pendientes; armar un plan financiero y reducir gastos; permanecer en el trabajo actual por varios meses más o un año; y corregir la información errónea respecto a los datos personales y referencias reportadas a la entidad bancaria.
“Sea consiente de la capacidad que tiene para asumir deudas y en lo posible evite convertirse en un deudor moroso. Para ello, es necesario realizar un plan financiero en donde evalúe tanto las entradas y salidas de capital, y hasta cuándo y con cuánto dinero cuenta mensualmente para suplir la deuda que piensa adquirir”, señala.
Los expertos llaman la atención en torno a la prudencia frente a la solicitud de un crédito, para que esta alternativa de financiación sea una oportunidad y no se convierta en un dolor de cabeza que termine ahogando los ingresos.