En algún momento de la vida es necesario adquirir un crédito, por ejemplo para estudio, vivienda, invertir en un negocio o comprar el carro de sus sueños.
Sin embargo, es una decisión que puede impactar la experiencia crediticia y por eso es necesario consultar la mejor opción antes de tomar esta decisión.
En este punto es importante entender que no existe una época especial del año para adquirir una deuda, sino que lo más importante es que cuando se encuentre una opción se revise si la tasa es una de las más bajas del mercado y si la cuota de esta nueva deuda se ajusta a la situación financiera.
Las opciones
Así mismo, una vez tomada la decisión, hay diferentes opciones para adquirir un crédito. Desde los bancos tradicionales, entidades oficiales de gobierno o incluso las fintech.
De acuerdo con un Reporte de Inclusión Financiera (RIF) de la Banca de las Oportunidades, a corte de febrero de 2023, el 63 % de los colombianos utiliza servicios de banca móvil, lo que refleja la creciente preferencia por canales digitales en lugar de sucursales físicas.
Es que para tomar un crédito hay que tener un objetivo definido, ya que esto permite orientar de manera efectiva las decisiones financieras.
Además, al definir con precisión el propósito, ya sea la compra de una vivienda o la adquisición de un automóvil, se puede evaluar qué tipo de préstamo se ajusta mejor a las necesidades. Para este último, las personas pueden solicitar, por ejemplo, préstamos para vehículos, camperos, camionetas o vans.
También hay que revisar las tasas de interés. Es crucial tener claro el objetivo del crédito al momento de revisar las tasas, ya que estas pueden variar significativamente dependiendo del tipo de préstamo y de la entidad financiera.
Plazos y planes
De igual forma, es importante no asumir plazos largos. Se debe considerar el período de tiempo en el que estará pagando el crédito. Un plazo más largo puede implicar cuotas mensuales más bajas, pero también aumentará el costo total del crédito debido a los intereses acumulados.
De igual forma, se debe realizar un plan financiero y asegurarse de tener la capacidad financiera para pagar las cuotas. Hay que considerar la situación actual, ingresos, gastos y obligaciones existentes.
Además, hay que tener presente que la cuota del crédito no debe rebasar el 20 % de los ingresos mensuales para que no se afecten los ingresos del hogar.
Con planeación
Hay que tener en cuenta que adquirir un crédito es una decisión que requiere una cuidadosa planeación. Tener en mente los aspectos mencionados puede ser una guía útil para evaluar las necesidades con precisión y elaborar un plan sólido para gestionar el producto de manera responsable.
Al seguir estas claves, es posible que se puedan aprovechar los beneficios del mercado de manera responsable, alcanzar sus objetivos y mantener una estabilidad financiera a largo plazo, entre otros consejos.
Hay que tener en cuenta que en Colombia, de acuerdo con un estudio de Situación Social presentado por BBVA Research, el 92,1 % de los adultos tiene algún producto financiero; sin embargo, en el campo la cifra solo alcanza el 55 %, dato que coincide con los índices de pobreza rural que se ubican por encima de la media nacional.