Comprar todo tipo de bienes o servicios hace parte de la vida cotidiana de cada ciudadano, incluso desde que tienen uso propio de la razón, pues se empieza con pequeñas adquisiciones, mientras se aprende cómo funciona el dinero.

Conforme el paso del tiempo, las responsabilidades van creciendo y se va haciendo necesario entender cuáles son las mejores maneras de hacer compras que resulten siendo beneficiosas para el bolsillo, más allá de satisfacer, bien sea una necesidad o un gusto.

Esto se hace más evidente, aún más, cuando el mundo entero atraviesa una inflación que afecta a todo tipo de persona, independientemente del punto geográfico en el que se encuentre. Lo que significa que las personas siguen ganando el mismo monto de dinero, pero por el alto precio de las cosas, ese dinero alcanza para comprar menos (objetos, bienes o servicios).

En ese sentido, las entidades financieras brindan una posibilidad, que si bien, puede ser una solución efectiva para un momento de requerirlo, puede, también, convertirse en un arma de doble filo, que debe saber utilizarse.

Sin embargo, luego de tener un ingreso fijo, es una herramienta, que sabiendo emplearse, puede ayudar mucho a la economía personal. Y se trata de la tarjeta de crédito. La cual en muchas entidades financieras o bancos, ofrecen con distintos beneficios para quien decida hacerse acreedor de la deuda.

Así las cosas, si este tipo de implemento va a ser obtenido por primera vez en la historia de la vida de cada persona, vale mencionar algunos requisitos que se deben atender al momento de hacer la solicitud, respectivamente, tales como:

  • Ser mayor de edad
  • Tener ingresos mensuales iguales o superiores a 1.000.000 de pesos, o un salario mínimo
  • Tener los datos laborales y financieros a la mano como situación laboral, cantidad exacta de ingresos y tipo de vivienda (familiar, rentada, propia, etc.)
  • Hacer el proceso para solicitar la tarjeta en línea (algunas entidades financieras tiene la ventaja de ofrecer el servicio de manera digital)
  • Esperar la respuesta de aprobación por parte del banco o neobanco (banca digital)

Lo bueno de obtener una tarjeta de crédito por primera vez es que se inicia una vida crediticia, sirve para tener un plan B para los gastos y con algunas se pueden hacer pagos con la tarjeta en los comercios en el extranjero.

Como se mencionó anteriormente, tenerla puede brindar ciertos beneficios, sabiendo manejarla y aprovechar los convenios entre distintas marcas, restaurantes, o empresas de ventas de todo tipo de bienes o servicios; es decir, muchas veces los bancos o FinTech brindan descuentos o “regalos” a sus afiliados o clientes, por pagar en distintos establecimientos o comercios electrónicos con sus tarjetas de crédito.

Asimismo, hay que resaltar, que algunos bancos ofrecen la posibilidad de no pagar una cuota de manejo por utilizar la tarjeta, lo que significa que le estarían “ahorrando” al usuario alrededor de unos 20 a 30 mil pesos, cifra que mensualmente se cobra en algunos bancos, y anualmente serían de 240 a 360 mil al año, solamente de cuota de manejo.

De otro lado, está la tasa de interés, que es ese porcentaje sobre el valor del crédito solicitado que cobran las entidades financieras, es como pagar el “favor” que le están haciendo al usuario. En ese sentido, las tasas de interés pueden variar desde el 0.7 % e incluso ir hasta el 3 % y más. Por eso, es un tema que debe evaluarse con lupa, para revisar cuál es la mejor opción en cuanto al tema.