Ante las dificultades económicas actuales, cientos de personas buscan un préstamo en entidades bancarias para poder financiar proyectos de vida, sea una casa, estudios o un nuevo emprendimiento, entre otras razones, pero a pesar de las bondades que se han expandido y la amplia gama de oportunidades que existe en la actualidad para obtener los recursos que se necesitan, algunos no logran obtenerlo.
Pues bien, el historial crediticio es un registro que cada persona que ha tenido algún tipo de transacción con establecimientos comerciales electrónicamente o con algún tipo de obligación de pago a crédito, construye a través de las mencionadas acciones; que este sea bueno o malo, hace parte de la hoja de ruta de las entidades bancarias para prestar o no un dinero a un solicitante, según recalcan algunas entidades en sus páginas web.
Un dato relevante es que una persona que busque solicitar un crédito o pedir algún tipo de financiación debe tener algún tipo de “vida crediticia”, puesto que al no tenerla también es una causal para que se nieguen algunos compromisos o beneficios comerciales.
Así entonces, una de las razones más importantes para cultivar un buen historial crediticio es la posibilidad de acceder a un crédito o alguna compra bajo esta premisa, según explica la Clariana Carreño, quien es presidente de DataCrédito Experian para el medio local Pulzo, agregando que este tipo de información es un insumo para los bancos y comercios a la hora de beneficiar a algún usuario.
La segunda razón por la que es necesario tener un buen historial crediticio es porque este puede habilitar grandes oportunidades, como la emisión de diferentes y cada vez más favorables tarjetas de débito y crédito, así como préstamos de grandes sumas de dinero, o incluso para trámites internacionales, según indica en su portal el Banco BBVA.
Y una tercera razón por la cual es necesario poner atención al historial crediticio y comenzar a formar uno bueno desde temprana edad, es porque este tipo de comportamientos y obligaciones hacen que la persona desarrolle una “conciencia financiera”, lo que le permitirá también tener un límite de endeudamiento y tomar decisiones más asertivas en el futuro, según Carreño.
¿Cómo cuidar su historial crediticio?
Es importante que sepa que un crédito o una tarjeta de crédito implican una serie de responsabilidades y obligaciones que usted debe cumplir al pie de la letra si quiere que su score se mantenga en los puntajes indicados para futuras solicitudes.
El portal del banco BBVA entregó una serie de recomendaciones que le ayudarán a cuidar y proteger su historial crediticio, hoja de vida dentro del sector financiero, que le abrirá o cerrará las puertas a la hora de buscar un préstamo.
Conoce su capacidad de pago
Mucha gente acude a los bancos sin tener presente que la obligación que planea adquirir supera su capacidad de pago o endeudamiento. En este caso, la recomendación es que sus deudas no superen el 30 % de sus ingresos mensuales; así mismo, es prudente hacer una lista de los pagos fijos mensuales que debe hacer para saber si puede echarse una carga más sobre los hombros.
Puntualidad
Es uno de los puntos clave a la hora de quedar bien parado frente al sistema financiero. El cumplimiento de sus obligaciones en el tiempo pactado es una buena señal para los bancos, pues demuestra solidez financiera, una buena señal a la hora de solicitar un crédito.
Atrasarse un par de días no es grave y no se representará en una peor calificación; sin embargo, hacerlo de forma recurrente o acumular una deuda habla muy mal de usted y seguramente los bancos no darán visto bueno a su solicitud.
Ordene sus finanzas
Saber cuánto recibe y cuánto gasta es un aspecto clave para dimensionar que valor puede solicitar a un banco a la hora de endeudarse. Esto le ayudará a ser cumplido con sus pagos y a mantenerse al día ante las centrales de riesgo.
Recuerde que antes de adquirir cualquier obligación financiera, es necesario preguntarse si es necesario incurrir en ese gasto. Si la respuesta es no, es preferible que siga ahorrando y recurra al crédito cuando en verdad sea apremiante.