El uso de la lavadora es una de las principales necesidades a las cuales tiene que acceder las personas a nivel mundial.
Debido a los ciclos de carga y a las restricciones que tienen estos electrodomésticos, los usuarios no pueden realizar el lavado de toda su ropa en una sola tanda, generando mayores consumos eléctricos.
Por otra parte, las restricciones para no combinar prendas y causar una tragedia a su vestuario hace que los usuarios tengan que encender en más de una ocasión la lavadora, causando grandes gastos de luz que repercuten en su recibo a final de mes.
¿Cuál es la afectación al recibo de luz?
El principal factor que determina el consumo energético de una lavadora es la cantidad de electricidad que utiliza para calentar el agua. Aunque los modelos más modernos son más eficientes, aún se necesita una cantidad considerable de energía para calentar el agua a temperaturas altas, lo que constituye una gran parte de la factura eléctrica.
La duración del ciclo de lavado, la carga de ropa y la temperatura seleccionada también afectan el consumo.
Cada ciclo de lavado puede consumir entre 0.3 y 1.5 kWh de electricidad, dependiendo del modelo y del ciclo elegido. Multiplicado por varias cargas diarias, esto puede suponer un aumento significativo en el consumo mensual de energía.
Para minimizar el impacto energético, se recomienda agrupar la ropa en cargas completas y evitar lavar pequeñas cantidades varias veces al día. Además, se puede aprovechar las tarifas de electricidad más bajas, lavando durante las horas valle cuando el costo de la energía es menor. De esta forma, se maximiza la eficiencia del uso de la lavadora sin incurrir en gastos excesivos.
Otro aspecto que ayuda a reducir los gastos es asegurarse que la lavadora debe estar en perfectas condiciones, es decir, usted debe mantenerla limpia y periódicamente hacerle un mantenimiento profundo con empresas especializadas.
Por otra parte, usar programas de bajo consumo: Muchas lavadoras modernas incluyen modos eco que utilizan menos electricidad y agua. Estos programas son ideales para lavados regulares y reducen significativamente el consumo de energía.
Gasto de Agua en lavadoras
En promedio, una lavadora consume entre 50 y 100 litros de agua por ciclo, dependiendo de su tipo, eficiencia y carga. Las lavadoras tradicionales suelen gastar más agua que los modelos de alta eficiencia, que pueden reducir su consumo hasta un 30-40% en comparación con las versiones más antiguas. Sin embargo, incluso las lavadoras más eficientes no son inmunes a la cantidad de agua que emplean en cada lavado, lo que puede generar un impacto significativo en áreas con problemas de escasez hídrica.
¿Cómo Reducir el Gasto de Agua?
- Optar por modelos eficientes: Las lavadoras con clasificación energética A++ o A+++ no solo consumen menos electricidad, sino que también requieren menos agua por ciclo. Además, estas máquinas suelen contar con sensores que ajustan el consumo de agua según el tipo y tamaño de la carga.
- Lavados a carga completa: Evitar usar la lavadora cuando no está completamente llena es una forma sencilla de reducir el consumo de agua. El gasto de agua no se reduce si se realiza medio ciclo con poca ropa, ya que la máquina usará casi la misma cantidad de agua sin importar la carga.
- Reutilización de agua: En algunos casos, el agua de los lavados previos puede ser reutilizada para el siguiente ciclo o para otros usos domésticos, como riego de plantas.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.