En medio de la crisis demográfica que viven la mayoría de países europeos debido al llamado ‘envejecimiento poblacional’, y a las consecuencias que ello ha tenido sobre el capital humano, en tanto este se encuentra en déficit para cumplir con las expectativas del sector productivo, países como Alemania, han comenzado a estudiar una serie de medidas que le permitan atraer inmigración cualificada; es decir, extranjeros que cuenten con las calidades o características requeridas por el mercado laboral local.

En ese sentido, y ante la problemática expuesta en repetidas ocasiones por los distintos sectores productivos y empresariales de ese país, el Ministerio de Trabajo alemán ha emprendido una serie de estrategias para atraer mano de obra proveniente de otras regiones del mundo, con el objeto de solventar un hueco o déficit de trabajadores calculado en cerca de 250.000 personas; situación que representa un ‘obstáculo’ para la consecución de las metas que se traza el sector empresarial.

En medio de esa estrategia, las autoridades alemanas han optado por la implementación de un modelo de permiso de trabajo para los extranjeros, similar a la llamada ‘green card’ de Estados Unidos, en la que propende por dar ciertos beneficios a los migrantes que llegan a solventar dicho déficit de mano de obra; no obstante, y debido a los intereses del sector empresarial, la medida privilegia a los trabajadores que cuentan con ciertas características, que los hacen más adecuados o atractivos para el sector empresarial local.

En ese sentido, esa tarjeta de oportunidades, abre las puertas a personas como un inmenso sector de la población colombiana que, tras culminar su etapa de formación académica, han presentado serios problemas para vincularse al sector productivo, engrosando la lista de personas cesantes o desempleadas.

El permiso especial de trabajo, según detallan medios locales, comprende a poblaciones ‘no europeas’, en la medida en que ese sector de la población posee facilidades de permisos laborales y de permanencia, derivados de la pertenencia de su país a la Unión Europea.

Así, los permisos especiales, abren nuevas puertas a la población colombiana habida de nuevas oportunidades, y que, debido a la situación económica, se encuentran en la búsqueda de nuevos destinos, en una línea similar a la abierta por países como Estados Unidos, Canadá y España, que buscan la migración cualificada.

De acuerdo con lo explicado por las autoridades alemanas, si bien estos nuevos permisos de migración y permanencia se encuentran ligados a una serie de características particulares, y son ‘limitados’, abren un abanico importante de oportunidades para la migración.

Así, uno de los factores claves en dicho proceso, es que dicho permiso entrega u otorga autorización para el ingreso de los extranjeros al territorio alemán, con el objeto de que puedan comenzar el proceso de búsqueda de trabajo; es decir, su otorgamiento no está ligado exclusivamente a quienes ya poseen una oportunidad laboral o puesto de trabajo antes de viajar.

En ese sentido, el permiso especial lanzado por las autoridades alemanas da un plazo de un año de permanencia para que los trabajadores logren ubicarse, para comenzar a trabajar.

En ese sentido, este permiso también otorga la posibilidad para que, mientras se consigue un trabajo estable, los migrantes cualificados puedan optar por la realización de trabajos temporales u ocasionales, según precisan medios internacionales.

Como dejan claras las autoridades locales, el nuevo mecanismo apunta a la consecución de trabajadores cualificados, y por ello, los aspirantes deben responder a un marco de características para optar por ello, según lo explicado por el mismo Ministerio de Trabajo teutón.

En el abanico de requisitos a cumplirse por parte de los candidatos a dicho permiso especial, se encuentra el ser personas que ya hubiesen terminado su etapa de formación académica, al menos en sus niveles técnico, tecnólogo o profesional; en ese mismo sentido, se requiere de haber comenzado ya a trabajar, y llevar vinculado al sector productivo por al menos 3 años.

En ese mismo sentido, y como un requisito para garantizar que el aplicante pueda ‘defenderse’ en Alemania, el gobierno de ese país exige que el candidato posea algún conocimiento en su idioma, y con el objetivo de garantizar la perdurabilidad de estos migrantes, y que se asienten en ese país, formando allí sus familias, también requieren que estos no superen los 35 años.

Si bien de momento Colombia forma parte de los países que no requieren visado para el ingreso a ese país, es importante reconocer que el permiso de permanencia actual es ‘limitado’ (máximo 90 días), y que las posibilidades de acceder a trabajar son nulas.

Esta oportunidad lanzada por el gobierno alemán, representa una opción interesante para quienes desean migrar del país, más aún teniendo en cuenta que, a partir del próximo año, los nacionales que deseen viajar a Europa, requerirán de un permiso especial, diferente al visado, para ingresar a los países de la comunidad.