Cuando se trata de trabajar, muchas veces nos centramos en cumplir con nuestras responsabilidades y metas sin prestar atención a nuestra salud. Sin embargo, una rutina laboral saludable es clave para prevenir enfermedades y mantener un buen equilibrio entre nuestra vida personal y profesional.

Tener una vida laboral saludable es esencial para el bienestar general de las personas y para mantener una buena calidad de vida. Pasamos gran parte de nuestro tiempo trabajando, por lo que es fundamental que tengamos hábitos saludables en el entorno laboral para prevenir enfermedades y lesiones.

Aunque el estrés laboral tiene consecuencias profesionales y laborales, los trabajadores no suelen ir al médico para cuidar su salud mental y, cuando van, los síntomas son más serios. | Foto: El País

Una vida laboral saludable puede ayudar a prevenir enfermedades crónicas como enfermedades cardiovasculares, diabetes, obesidad, dolores de cabeza, dolores de espalda, entre otras. Esto se debe a que tener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente, mantener una buena postura y descansar lo suficiente son factores que contribuyen a la prevención de enfermedades.

También puede aumentar la productividad, ya que cuando las personas están en buena forma física y mental, tienen más energía y pueden trabajar más eficientemente. Además, al tener hábitos saludables, las personas pueden evitar el agotamiento y el estrés, lo que les permite trabajar de manera más efectiva y eficiente.

Uno de los primeros pasos para tener una rutina saludable es establecer horarios regulares para trabajar. | Foto: Thomas M. Barwick INC

A continuación, te presentamos algunos consejos para tener una rutina saludable y evitar enfermedades en el trabajo:

1. Establece horarios regulares: Uno de los primeros pasos para tener una rutina saludable es establecer horarios regulares para trabajar. Si trabajas en casa, trata de tener un espacio dedicado exclusivamente al trabajo para evitar distracciones. Además, evita trabajar en exceso y trata de mantener un horario de apagado claro para evitar el agotamiento.

2. Haz pausas regularmente: Es importante hacer pausas regulares para descansar y recargar energía durante tu jornada laboral. Puedes aprovechar estos momentos para hacer estiramientos, caminar un poco o simplemente tomar un descanso mental. Las pausas te ayudarán a mantenerte concentrado y productivo durante todo el día.

3. Mantén una buena postura: Si trabajas en una oficina o en un escritorio, es crucial mantener una buena postura para evitar dolores de espalda y otros problemas de salud. Asegúrate de tener una silla ergonómica y ajustarla correctamente. Además, intenta levantarte y caminar cada cierto tiempo para estirar los músculos y evitar el sedentarismo.

4. Aliméntate de manera saludable: Una alimentación equilibrada es clave para tener una rutina saludable. Evita alimentos procesados y trata de incluir frutas, verduras, proteínas y carbohidratos complejos en tu dieta. Además, evita comer en exceso y trata de hacer pequeñas comidas saludables durante todo el día para mantener tu energía.

Clara Valderrama, integrante del Consejo Consultor de Dietistas de Herbalife, explica que, dado que gran parte de nuestro día transcurre en el trabajo, prestar atención a nuestros hábitos de alimentación en el ambiente laboral es crucial.

“Proporcionarle al organismo los nutrientes adecuados, a través de una alimentación sana y balanceada, contribuye a nuestra salud. Sentirnos bien, con energía y enfocados para afrontar los retos de la jornada laboral es muy positivo”, afirmó la nutricionista.

Las infecciones virales y los problemas osteomusculares son las principales causas de incapacidad entre los trabajadores del régimen contributivo.

5. Mantén una buena hidratación: Beber suficiente agua es importante para mantener tu cuerpo hidratado y ayudar a tu sistema digestivo. Trata de beber al menos ocho vasos de agua al día. También puedes tomar infusiones o tés sin azúcar para hidratarte y mantenerte alerta.

6. Haz ejercicio regularmente: El ejercicio es vital para mantener una buena salud física y mental. Intenta hacer al menos 30 minutos de actividad física al día, incluso si es solo caminar. Si trabajas en una oficina, trata de caminar o hacer estiramientos durante tus pausas para mantener tu cuerpo activo.

7. Establece límites: Es fundamental establecer límites claros entre tu vida personal y profesional. Trata de desconectar del trabajo cuando no estás trabajando y establece horarios de apagado para evitar la sobrecarga laboral. Además, trata de hacer actividades que te gusten fuera del trabajo para relajarte y mantenerte motivado.

Tener una vida laboral saludable es fundamental para mejorar nuestra calidad de vida y aumentar nuestra productividad en el trabajo. | Foto: Hinterhaus Productions 2016

Tener una vida laboral saludable es fundamental para mejorar nuestra calidad de vida y aumentar nuestra productividad en el trabajo. Adoptar hábitos saludables como hacer ejercicio regularmente, mantener una dieta equilibrada, descansar lo suficiente y cuidar nuestra postura, nos permitirá prevenir enfermedades, mejorar nuestro estado de ánimo y reducir el estrés.

Además, fomentar una cultura empresarial saludable puede ser beneficioso para los empleados y las empresas, ya que puede mejorar la satisfacción laboral y la lealtad de los empleados, disminuir el absentismo laboral y atraer y retener talentos. En definitiva, cuidar nuestra salud en el entorno laboral es fundamental para nuestro bienestar y éxito en el trabajo.